EL DNU es una oportunidad para la recuperación del Sistema Privado de Salud
"El Sistema de Privado de Salud llegó a diciembre de 2023 exhausto y con numerosas instituciones asistenciales al borde de la quiebra", afirma Fernando Coppolillo, gerente general de Medifé, la empresa de medicina prepaga con más de 300.000 asociados, que trabaja con una red de 20.000 prestadores en todo el territorio nacional.
"Durante el año 2023 se fue armando la tormenta perfecta: una tasa de inflación por encima del 200%, la hiperregulación de la actividad de salud privada con el atraso de precios y sueldos, el aumento del precio de los medicamentos que impactan en los costos de sanatorios de las prepagas por encima del 300%. Todos estos factores pusieron al sistema al borde del abismo", comenta el ejecutivo a este medio.
El Decreto de Necesidad de Urgencia 70/23 contiene un extenso capítulo que apunta a la desregulación del sistema de salud privado: incluye la posibilidad de enviar los aportes y contribuciones en forma directa a una empresa de medicina prepaga sin necesidad de la intermediación de una obra social, así como la desregulación de precios para generar una sana competencia entre las obras sociales y empresas de medicina prepaga de salud.
"EL DNU 70/23 es un primer paso para un proceso de recuperación del sector privado de salud, que se veía seriamente amenazado en su viabilidad con el modelo anterior", afirma Fernando Coppolillo.
"Sabemos que el primer trimestre del año implicó un esfuerzo muy grande para las familias que tienen cobertura privada de salud. Los aumentos fueron necesarios para actualizar los costos y sueldos de los Sanatorios y Prestadores, que sufrieron un atraso tan significativo con el viejo régimen de regulación que los llevo al límite de poder seguir funcionando", agrega.
"Por eso, en el actual contexto, en la búsqueda de adaptarnos al presupuesto de los asociados, en Medifé implementamos nuevas opciones de servicios para dar respuesta a las necesidades de atención, manteniendo la calidad de la cobertura", señala.
Debemos aclarar que el sistema privado de salud funciona en forma solidaria. Por cada $100 que un asociado aporta a una obra social o prepaga, $85 se utilizan para pagar tanto a los profesionales de la salud, los sanatorios, los medicamentos y las prestaciones que requieren las personas que atraviesan una enfermedad dentro de la cartera de asociados.
"El DNU 70/23 nos da una perspectiva de mayor eficiencia y transparencia. Si bien quedan temas importantes para resolver y seguir avanzando (como la cobertura de medicamentos de altísimo precio), una marcha atrás en la desregulación afectaría seriamente la sustentabilidad y calidad del sistema privado de salud", concluye.