Industriales critican liberación de importaciones y alertan por "trato desigual"
La caída de la actividad industrial y los beneficios para los importadores de productos terminados son dos aspectos que preocupan a la UIA. Así lo hicieron entender mediante un comunicado difundido este martes, en el que expresaron su "preocupación" por la actualidad económica.
Según remarcaron desde la entidad, los representantes sectoriales y regionales analizaron la dinámica industrial durante los primeros dos meses de 2024. "La caída del mercado interno y el impacto del crecimiento de los costos fueron algunos de los temas planteados. Se marcó la necesidad de desarrollar nuevos instrumentos de política industrial (líneas de financiamiento, medidas tributarias, laborales, entre otras), junto con acciones para amortiguar el impacto en las pymes y en las economías regionales ante un escenario recesivo", señalaron.
"Se destacó la importancia de generar una pronta recuperación del nivel de actividad para lograr las metas fiscales, monetarias y cambiarias sosteniendo el nivel de empleo y producción. Los representantes sectoriales y regionales manifestaron además su apoyo a la modernización de la legislación laboral vigente para adaptarse a las nuevas realidades laborales, de acuerdo con el Libro Blanco de la UIA", agregaron.
Preocupación por los beneficios a importadores
Otro de los puntos destacados por los industriales fue el anuncio del Gobierno de otorgar beneficios a los importadores de productos terminados, sobre todo en lo referido al consumo masivo y alimentos. "Los representantes manifestaron su preocupación por lo que consideran un trato desigual para la industria. Mientras los productores nacionales deben pagar en 4 cuotas mensuales y con impuesto PAIS los insumos necesarios para la fabricación, los importadores de bienes terminados estarán exentos de impuestos y tendrán acceso total a las divisas necesarias en un solo pago a 30 días", señalaron desde la entidad.
En ese sentido, aseguraron que el anuncio realizado por el Gobierno "afecta seriamente la competitividad de las empresas que operan, producen y emplean en el país".
La medida fue anunciada el martes por el portavoz Manuel Adorni, quien dijo que tiene como objetivo mejorar la competencia y apuntalar la baja de la inflación en los productos de la canasta básica y medicamentos. "Entendemos que la economía de a poco se va normalizando y en esta línea se ha tomado la determinación de abrir definitivamente las importaciones de determinados productos de la canasta familiar en pos de poder hacer los precios más competitivos en beneficio de las familias y de los consumidores argentinos", informó.
El relevamiento de la UIA y los datos que preocupan
Por otra parte, el Centro de Estudios UIA presentó los indicadores de actividad industrial del mes de enero y los resultados de la primera Encuesta de 2024, que alcanzó a más de 700 empresas. Los datos relevados muestran una coyuntura de fuerte contracción producto de la corrección cambiaria ante la falta de reservas y la acumulación de los desequilibrios macroeconómicos durante el año 2023. Durante ese mismo período se acumuló una importante deuda comercial y se incrementaron las restricciones para la importación de insumos críticos para la producción.
En este contexto, el Monitor de Desempeño Industrial (MDI) -que adelanta el ciclo de actividad industrial- volvió a situarse en zona de contracción por séptima vez consecutiva.
Otro dato que se destacó es que "se registraron los niveles más bajos de la serie en las variables de producción y ventas, indicando una agudización de las dificultades en el entramado productivo industrial, especialmente en las PyMES (participación del 96% en la muestra)". "Esta situación redundó en más empresas con dificultades para hacer frente a los pagos", detalló
También en este marco hubo un cambio de tendencia en la serie de empleo, que hasta el momento era la que evidenciaba mayor estabilidad. Se registró el porcentaje más alto de empresas con caída del empleo y un deterioro notable en relación a relevamientos previos.
Las empresas consideraron que su situación económica está peor que hace un año y esperan el impacto de la calidad del consumo, la obra pública y la menor actividad de otras empresas. Sin embargo, en cuanto a las expectativas para dentro de un año, aproximadamente el 50% de las empresas espera que la situación económica de su empresa, del sector y del país, mejore en el próximo año.