Recuperó las fórmulas de su abuela y las convirtió en una marca de cosmética "consciente"
BŐR tiene sus raíces en Rosedibor, el laboratorio de Piroska Borsits, húngara nacionalizada argentina. Piroska tenía una piel impecable y un inconfundible estilo europeo. Nació en Hungría en 1925, pero de niña dejó su país y viajó junto a sus padres, para radicarse en la provincia de Córdoba, Argentina.
Adelantada a su época, fue una de las primeras mujeres en estudiar Farmacia y Bioquímica en la Universidad Nacional de Córdoba. Luego se capacitó en París, y en 1965 fundó Rosedibor, su laboratorio de cosmética, al lado de su casa, en Alberdi, Córdoba. En aquel momento, Piroska hacía cremas para el cuerpo y luego continuó con una línea facial muy extendida e inclusive una línea de maquillaje.
La esencia de sus productos quedó escrita en materiales que su familia conservó y hoy su nieta los convirtió en una marca que ya tiene presencia en miles y miles de farmacias del país.
"Desde hace ya un año, poniendo mucha dedicación y trabajando con un equipo de bioquímicas especializadas en cosmética natural, emprendimos la aventura de relanzar sus productos, actualizándolos a la tecnología de hoy", expresa Carolina Di Carlo, nieta de Piroska.
Una empresa familiar de cosmética natural
Rosedibor renació para convertirse en BŐR, que casualmente significa "piel" en húngaro. Se trata de una empresa familiar, que ofrece productos de cosmética natural, apto veganos y que no testea en animales. El lanzamiento de los primeros productos de esta generación fue hace 2 años, en marzo de 2021.
"Le damos mucho valor a la tradición. De hecho, nuestra marca tiene que ver con una historia familiar y la importancia que tuvo la cosmética siempre en nuestra familia, y también le damos un fuerte valor al medio ambiente, por eso nuestros productos son naturales", argumenta la joven.
El nuevo proyecto, que tuvo una inversión inicial 10.000 dólares, tuvo un gran recibimiento por parte de los canales de venta de cosmética contando ya con varios clientes como Farmaonline, Farmacia Leloir, Botane, Natural Shop, Suri Ecotienda, y muchos otros que lo incorporaron desde el principio.
"En 2022 vendimos más de 2.500 productos y la idea es duplicar las ventas este año", plantea. Algo que ven posible en tanto que "los productos que son amigables con el medio ambiente son muy valorados por el cliente".
"Los productos gustan y, una vez que los prueban, hay mucha recompra", asegura la vocera. "Como somos una marca nueva, y bastante de nicho, hay mucha gente que aún no nos conoce, pero estamos trabajando para eso", agrega.
BŐR, una marca actual con una esencia familiar
Hoy la producción se terceriza en un laboratorio y el desarrollo de las fórmulas está a cargo de dos bioquímicas que trabajan siempre en base a los fundamentos o activos de la línea inicial (Rosedibor), "pero actualizando las fórmulas a las tendencias de hoy", aclara Di Carlo quien, junto a su familia, se encarga también de la comercialización y administración de la marca.
En cuanto a los principales obstáculos con los que se fueron encontrando desde que iniciaron el proyecto, la joven cuenta que son los tiempos de importación de algunas materias primas y envases.
Sobre cómo proyectan el crecimiento de la empresa, la emprendedora dice que vienen realizando producciones "que se agotan por lo que estamos, de a poco agrandando, los lotes para poder aumentar el stock dentro de los canales de venta con los que ya trabajamos y maximizar el uso de esos canales".
Por último, "estamos comenzando a ampliar la línea. Los próximos pasos son el lanzamiento de la crema bioactiva y a mediano plazo proyectamos la incorporación de productos para el cuerpo y el pelo. Finalmente, en algún momento quisiéramos abrir nuestra propia tienda".