Quién es el empresario argentino que trae a Taylor Swift y ya saborea una millonaria ganancia
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A los 49 años, Diego Finkelstein, ya no debería ser considerado un emprendedor. Acaso la edad no importe demasiado para pertenecer a esa categoría, pero sí cuentan los millones de dólares que recauda cada vez que llena el Monumental y vende ubicaciones en las que, por ejemplo, no se puede ver al artista, por ser puntos ciegos según la ubicación del escenario y sólo concurren para escucharlo. Eso ocurrirá en las hasta ahora tres presentaciones que brindará Taylor Swift, que le aseguró una recaudación récord.
Es un empresario con una larga historia de asociaciones locales e internacionales que lo ha llevado a convertirse en el hombre récord en cantidad de presentaciones de artistas que facturan millones aún en plena crisis económica.
En su momento se asoció a Marcelo Figoli, empresario del entretenimiento y de la comunicación, a Eduardo Elztain, del grupo Irsa, y logró una proyección internacional al asegurarse la venta del 51% de su productora DF Entertainment.
Y por último, pero no menos importante, se podría pensar que tuvo como aliado a la pandemia porque se bien, durante los dos años en los que se extendieron las cuarentenas ordenadas por la administración de Alberto Fernández, Finkelstein no pudo realizar ningún show pero tampoco lo pudieron realizar sus competidores.
Un público deseoso de ver espectáculos internacionales
Sin embargo, esa falta de producción e ingresos fueron superados ampliamente por el ansia del público argentino que suele endeudarse para ver a los artistas internacionales que los enamoran.
Esa ausencia de fechas, de shows, fueron compensados por la demanda que existió tras la pandemia cada vez que se vendieron los tickets del festival Lollapalooza, los 10 recitales de Coldplay en el Monumental de Núñez., ahora, los shows de Taylor Swift que tiene valores altos para el actual poder adquisitivo de los argentinos.
La necesidad de conectar con un artista se impuso y, a pesar de la crisis financiera de muchas familias, se postergan otros consumos pero se puja para obtener un ticket para ver y escuchar o sólo escuchar a la cantautora estadounidense.
El crecimiento exponencial de su productora
Finkelstein lo logró una vez más pero existe una historia para llegar hasta este momento exitoso de su productora.
En un principio, Diego Finkelstein trabajó con Marcelo Fígoli en la organización de eventos. El actual mandamás de Alpha Media tenía más de dos décadas en ese entonces trabajando en el rubro de entretenimiento y juntos realizaron numerosos shows con Fenix Entertainment Group.
Pero las desavenencias entre los socios no tardaron en aparecer y debió intervenir una firma de abogados, Zang, Bergel & Viñes que asesoraron en la creación de una nueva compañía de entretenimiento derivada de Fénix Entertainment Group, empresa que originalmente organizaba el festival Lollapalooza en el país.
El acuerdo se hizo efectivo el 20 de agosto de 2015 e involucró la venta de la participación de Diego Finkelstein (50%) a Marcelo Figoli, el otro accionista de Fénix, por una cifra no revelada.
En qué consistió el acuerdo
Por la separación, Diego Finkelstein retuvo los derechos para realizar el Lollapalooza en Buenos Aires, así como una participación del 50% en el centro de convenciones de Buenos Aires y en el estadio La Rural, mientras que Fénix, mantuvo los derechos para organizar espectáculos en el estadio de River Plate y el Club de Gimnasia y Esgrima.
La nueva compañía de Finkelstein se llamó DF Entertainment y como parte del acuerdo entre los dos ex socios, ambas empresas decidieron no competir en la organización de eventos deportivos, juegos y conciertos durante 5 años en las siguientes naciones: Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay.
Una vez transcurrido ese lapso, la competencia se hizo muy fuerte y en la actualidad Marcelo Figoli organiza distintos festivales y recitales internacionales intentando cortar tantos tickets como sean necesarios para pujar de igual a igual con su ex socio.
Con respecto al predio de La Rural, las empresas de Fígoli y de Finkelstein, manejaron el 50% del complejo que posee el mayor centro de eventos de la región, hasta que, en agosto de 2015 Eduardo Elztain que poseía el 50% del paquete restante a través de IRSA Propiedades Comerciales, compró la parte de Fígoli. De esa manera Diego Finkelstein quedó como socio minoritario de Elztain en el predio de La Rural y los empresarios completaron la compra del 100% de Ogden, la sociedad que maneja el mayor centro de eventos de la región.
Live Nation Entertainment, empresa rodeada de escándalos
Finalmente, en julio de 2017 el Gobierno de la Ciudad dio la operación del Centro de Exposiciones y Convenciones de la Ciudad de Buenos Aires a una UTE (unión transitoria de empresas) en la que IRSA tiene un peso preponderante y Finkelstein sigue teniendo participación. Pero el empresario dio un salto de calidad en 2018 cuando el 51% de su empresa DF Entertainment, fue adquirida por Live Nation Entertainment, una compañía líder del entretenimiento a nivel mundial no exenta de algunos escándalos en el exterior.
Live Nation cotiza en la Bolsa de Nueva York y es socia de la local DF Entertainment.pero el año pasado hubo una avalancha humana que mató a 8 personas en un recital de Travis Scott en Houston, Texas que produjo un derrumbe de sus acciones. El desastre fue de proporciones y hay que remontarse al tiroteo producido en el año 2017 en Las Vegas durante un festival de música country cuando un desequilibrado asesinó a 58 personas, para hacer alguna comparación.
A pesar de su trayectoria en la organización de recitales en EE.UU., la empresa Live Nation ha tenido numerosos problemas de seguridad en el pasado. La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional estadounidense poseen expedientes donde la empresa fue multada y varias veces demandada por una variedad de problemas que incluyeron un incidente del año 2018 por la hospitalización de una persona que fue golpeada en la cabeza por un poste de metal de dos metros de largo o el accidente de un trabajador que murió tras caer por un falso techo en un escenario. Ahora bien, se comprobó que el empleado no llevaba cinturones de seguridad ni ninguna otra protección laboral.
Por otra parte, Finkelstein fue nombrado en varias mesas de dinero cuando se preguntaba por el destino de la recaudación de los tickets vendidos en 2019 para la edición 2020 del Lollapalooza Argentina que finalmente se realizó en 2022 con un line up diferente y luego que el gobierno autorizó los recitales a cielo abierto.
El fabuloso roll over con las entradas vendidas del Lollapalooza 2019
El roll over en el que estaba pensando uno de los padres fundadores del rock and roll, Chuk Berry, en 1956, estaba dedicado a los cultores de la música clásica y a Ludwig van Beethoven que seguramente se revolcaría en su tumba, roll over in their grave, si supiera como el rhythm and blues y el rock and roll reemplazaron en las radios a la música culta.
Pero el roll over en el que pensaron los empresarios del capítulo argentino del festival de Lollapalooza fue eminentemente financiero e involucró el dinero recaudado por preventa de entradas a la edición 2020 del festival que debió suspenderse por las restricciones impuestas a causa de la pandemia de coronavirus.
Conseguir que se devolvieran los valores de las entradas era casi una misión imposible para los espectadores que querían participar del Lollapalooza en 2020 con los artistas anunciados en ese momento que fueron cambiados, casi en su totalidad, en el año 2022.Rumores del mercado financiero afirmaron que ese dinero recaudado ante de las cuarentena "eterna" se puso "a trabajar" para pasar el mal momento de la pandemia de Covid-19.
Live Nation surgió de la fusión de Live Nation y Ticketmaster en 2010 y se especializa en la venta de boletos del rubro del entretenimiento, su asociación con DF Entertainment se justificó por el nivel de gasto de los consumidores argentinos en tickets y por el expertise de Diego Finkelstein en mercados altamente regulados como el argentino.
La venta de entradas en la mira
La cuestión de la venta de entradas a través de la plataforma All Access que administra Finkelstein también fue objetada por asociaciones de consumidores que presentaron una demanda colectiva contra su productora por obligar a los fanáticos de la música a concretar la compra de entradas a los shows que organiza a través de la plataforma All Access, que suma al costo final entre un 8% y un 9% del valor de la entrada por los "costos de servicio".
Tanto la productora DF Entertainment como All Access tienen detrás al empresario Diego Finkelstein.
Según trascendió, en dos de cada tres shows que organiza DF Entertainment obligan a los consumidores a pasar por la web de All Access, que se lleva una jugosa tajada por cada compra. A modo de prueba, se ofrecieron tickets del festival Primavera Sound Buenos Aires, donde los asistentes pagaron $1.800 por "costos de servicio" en caso de optar por la entrada de tres días que tenía un precio de $12.000.
"Su comportamiento supone el enriquecimiento ilícito de las empresas a costa del bolsillo de los consumidores y usuarios", denunciaron desde la asociación civil. En su reclamo, además, exigen que haya un resarcimiento a los usuarios que fueron víctimas de esta maniobra, lo que podría generar pérdidas multimillonarias para la compañía en la que Finkelstein tiene como socio mayoritario a la estadounidense Live Nation Entertainment.
El nuevo Daniel Grinbank y el dólar Coldplay
A pesar de estos problemas nada detuvo la marcha de Diego Finkelstein para convertirse en el nuevo Daniel Grinbank. Aquel empresario que llenaba estadios con recitales muy populares durante la década del ’90.
Antes de la pandemia, Finkelstein había pronosticado a Chris Martin de Coldplay que "la próxima visita vamos a hacer 10 River" y consiguió materializar el pronóstico marcando un récord de convocatoria para un artista en el país.
DF Entertainment logró agotar los 650.000 tickets que se vendieron durante un año y hasta posibilitó que uno de los tantos dólares que generó el actual gobierno se llamara "dólar Coldplay". Se trata de un valor diferencial para las divisas que se utilizan para el pago de los honorarios de artistas internacionales que vienen a actuar a la Argentina.
Para establecer la cotización se aplica el impuesto PAIS, es decir un recargo del 30% sobre la cotización del dólar minorista del Banco Nación. La medida entró en vigencia el 12 de octubre último y se aplica sobre los pagos realizados a partir de esa fecha.
Si bien el reclamo fue realizado por el conjunto de los productores musicales, el dólar Coldplay tiene a Diego Finkelstein como su principal promotor y beneficiado para poder continuar con la contratación de los artistas y lograr acceder a las divisas de forma inmediata.
Fuentes del mercado del entretenimiento aseguran que "estos acuerdos suelen cerrarse en el exterior y el dinero que cobran los artistas suele llegar desde alguna cuenta fuera de la Argentina". Sin embargo, aún se desconoce si el dólar Coldplay tendrá una nueva versión como el dólar soja para las presentaciones de la exitosísima, Taylor Swift.