La CGT le pegó a la Justicia y bancó a Cristina Kirchner tras su condena: "Es una mancha en la historia"
Una vez conocidas las sentencias en el caso de Vialidad y tras las declaraciones realizadas por Cristina Fernández de Kirchner, el consejo directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) salió a rechazar el fallo condenatorio contra la vicepresidenta "por supuestos delitos contra la administración pública". Subrayó que "este vergonzoso veredicto se enmarca en una serie de inconsistencias jurídicas donde no se ofrece evidencia de hecho para probar delito alguno sino meras opiniones de los jueces y fiscales de la causa".
En un breve comunicado, la conducción de la central obrera subrayó: "En días donde la connivencia entre autoridades y operadores del Poder Judicial y el poder mediático fue definitivamente demostrada a partir de las revelaciones que surgieron del viaje a Lago Escondido, resulta fundamental señalar que esta decisión no es más que una mancha más en la historia de la Justicia argentina".
Asimismo, sostuvo que "esta Confederación General del Trabajo repite una vez más que los actos de gobierno no son judiciables, y solo el pueblo a través del voto decidirá el destino de sus representantes políticos".
Para la CGT, las denuncias fueron "sin sustento"
Cuando el fiscal federal Diego Luciani realizó las acusaciones contra Cristina Fernández, la CGT expresó que se trataban de denuncias "sin sustento" y remarcó que "los actos de gobierno a cargo de la máxima autoridad de la Nación realizados por el mandato popular no pueden constituir el vínculo que soporte un agravante para la calificación de una acusación sin sustento". Idéntica argumentación que utilizó ahora con el fallo.
Agregaron que "no hay una sola prueba material que relacione a la vicepresidenta con el direccionamiento amañado de la obra pública ni con ningún otro delito", afirmó que "el show mediático montado para sustentar la acusación tiene por finalidad dañar la imagen de la expresidenta y de todo el Peronismo" y advirtió: "Esperamos que se haga justicia y los jueces desestimen la antojadiza acusación".
Entre las integrantes del consejo directivo de la central obrera, quien tomó la palabra fue la secretaria General del Sindicato de Trabajadores Viales y Afines (STVyARA), Graciela Aleñá, quien sostuvo que la causa "está totalmente armada" y declaró que "este intento de proscripción a Cristina es un claro avasallamiento hacia el peronismo y a todo lo que ella representa".
Apuntó que "un sector de la justicia, que responde al macrismo y a los grandes medios de comunicación, armó una causa sin pruebas" y dijo sentir "una mezcla de tristeza y bronca por no saber quién te protege. Armaron una causa de la nada, tirando por tierra el informe de la propia auditoría de Vialidad, de una mentira que nadie ha podido comprobar, como son todas las denuncias que hizo Iguacel (procesado), el ex administrador más inepto de todos los que tuvimos en Vialidad Nacional".
El sindicato de Vialidad, involucrado en la causa
Aleñá indico que "durante todo el proceso judicial pudimos ver como Cristina fue desarticulando cada imputación y demostrando que todas eran falsas, tal como lo manifestó en el punteo, de las ´20 mentiras la Causa Vialidad´ que la expresidenta publicó en sus redes sociales".
Vale recordar que el Sindicato de Vialidad está involucrado en la causa. Por ese motivo, la titular del gremio se cruzó con Javier Iguacel, exdirector del organismo también imputado y con el exministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich. Aleña recordó: "Nos amenazaban con meter presos a nuestros compañeros, buscaron causas donde nos las había y ahora llevan adelante esta mentira penal contra Cristina para que no sea una referente en el 2023".
La también secretaria de Oportunidad y Género de la CGT cerró diciendo: "Hay que demostrar la indignación que tenemos todos con una justicia que no imparte justicia", y reflexionó: "No sé si hay un país que esté viviendo lo que vive la Argentina con algunos jueces. Mientras imputan sin contar con ninguna prueba a Cristina, Macri, que mandó a espiar a todo el mundo y cuando todavía estamos buscando los 45 mil millones que le dio el FMI para ser reelecto, está tranquilamente en Qatar disfrutando en mundial de fútbol".