Se tensa la paritaria metalúrgica: la dura pelea por el sueldo de empleados sigue sin arreglo
La paritaria de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) sigue sin resolución. Si bien logró acordar un aumento del 65%, el sector de la siderurgia (conformado por las empresas más importantes del país en este rubro) se niega a replicar la mejora, sosteniendo que hay un acuerdo vigente y que lo cumplirán si otorgar un peso más, a pesar del proceso inflacionario que atraviesa el país y el mundo. La situación derivó en medidas de fuerza que fueron suspendidas por el dictado de la conciliación obligatoria por el ministerio de Trabajo.
Esta semana se realizó una audiencia en la sede de la cartera laboral ubicada en Callao al 100, donde los empresarios del sector -Acindar y Ternium (Siderca y Siderar del Grupo Techint)- ratificaron su posición: no hay posibilidades de sellar un acuerdo como el firmado por el sector metalmecánico.
Las negociaciones entre el gremio y las patronales fueron acompañadas por una masiva movilización para respaldar las demandas laborales. Los metalúrgicos aprovecharon para marchar hasta las oficinas del Grupo Techint en Retiro, donde expresaron su malestar por la situación. Y anunciaron que aplicarán la misma modalidad la semana próxima en el nuevo encuentro entre las partes.
45% de aumento y actualización salarial
En marzo pasado, el entonces secretario General de la UOM, Antonio Caló, logró un 45% de aumento que quedó desfasado por el efecto inflacionario. El nuevo titular del gremio, Abel Furlán, reclamó entonces una actualización que fue rechazada por las empresas hasta que se anunció la aplicación de un plan de lucha. Inclusive, en algunas provincias se llegaron a cumplir paros por turno.
De esta forma, el gremio consiguió adelantar a agosto el aumento del 12% previsto en principio para octubre y sumas un 20%, dividido en dos cuotas: 10% en octubre y 10% en noviembre. De esta forma, consiguió para llegar a un total anual del 65%.
Sin embargo, las siderúrgicas desconocieron el acuerdo y anunciaron que "vamos a cumplir con la paritaria tal como está firmada", lo que desató la ira del consejo directivo metalúrgico. La posibilidad de medidas de fuerza abrió la intervención del Ministerio de Trabajo, que dispuso la conciliación obligatoria que finalizará el 17 de este mes, día en que la CGT llevará a cabo la movilización desde el Obelisco hasta la Plaza de los dos Congresos, para reclamar soluciones al proceso inflacionario y condenar a los formadores de precios.
Las negociaciones van de fracaso en fracaso
Se descuenta que ese día, los metalúrgicos volverán a marchar a la sede del ministerio de Trabajo. Al respecto, una fuente de la UOM señaló a iProfesional: "Las gestiones que venimos realizando van de fracaso en fracaso por la postura intransigente de estas patronales". Agregó que "de alguna forma, empresas como las del Grupo Techint son culpables de la inflación que sufre la Argentina. La movilización de la CGT pretende mostrar a esos grupos a los que no les interesa nuestro país".
Los voceros de la UOM coinciden en que "las empresas están tensionando la negociación en forma innecesaria, porque el reclamo que hemos presentado está dentro de los parámetros económicos que estamos atravesando, no estamos exigiendo un aumento del 100 por ciento".
Explicaron que "estas empresas venden en dólares y pagan en pesos, obteniendo estabilidad extraordinaria. Pero además está creciendo la producción y se están creando puestos de trabajo; sin embargo, tenemos sueldos con los que no podemos llegar a fin de mes".
Si bien la conciliación vence el próximo 17 de agosto, se puede prorrogar por cinco días más, por lo cual no habrá medidas de fuerza en los próximos días, en tanto el malestar crece en las fábricas. Por el momento, la UOM no puede realizar medidas de fuerza y las patronales están impedidas de aplicar sanciones al personal