Leonardo Cositorto, líder de Generación Zoe, habló desde la cárcel: "Hoy no puedo pagar"
Desde la cárcel de Bouwer, en la provincia de Córdoba, Leonardo Cositorto se refirió a las acusaciones de múltiples estafas que pesan sobre la organización que lideraba, Generación Zoe.
El líder pide que le den prisión domiciliaria para poder enderezar a Generación Zoe y realizar una convocatoria de acreedores, logrando de esta forma realizar una devolución de los capitales.
En este contexto, Cositorto asegura que cayó por una campaña de desprestigio. Jura que es objeto de una persecución con mezcla de intereses políticos, judiciales, empresariales y mediáticos. Consultado por la gente que perdió su dinero, responde lo siguiente: "Para todos los que se han sentido perjudicados lo que pido es la libertad, una domiciliaria con tobillera sin pasaporte, y generó una convocatoria de acreedores para que se presenten los que se creen damnificados y le podamos hacer una devolución de los capitales."
El autoproclamado gurú financiero está alojado en el MD1 de la cárcel de Bouwer, el pabellón al que van los acusados y condenados por delitos económicos, donde hay algo más de espacio y un poco más de confort que en el resto del penal, según Canal12.
La caída de Zoe, según Cositorto
Para el líder de la organización acusada de estafar ahorristas en Argentina, Colombia, México y Perú, entre otros países, el declive de Zoe empezó por una acción difamatoria.
"Ha habido acción de actores políticos, económicos, que nos fueron difamando, nos fueron mellando hasta que generaron una corrida muy fuerte en el mes de enero. La logré sostener desde afuera enviando, la mayor cantidad de fondos posibles."
Cositorto asegura que su empresa se dedica a la capacitación y sí, tenía un fideicomiso que respaldaba las operatorias. De acuerdo con su relato, todo funcionaba bien hasta que comenzó un "efecto dominó".
"Salgamos a decir que el Banco Santander está fundido y no tiene fondos. ¿Qué hacen todos los ahorristas? Van a retirar el dinero. Nosotros teníamos un montón de proyectos abiertos. 35, 36 proyectos a nivel mundial. Nos hacen una corrida y las sostenemos en enero. Si fuese un estafador para qué voy a enviar 17 millones de dólares para ponerle a la gente."
Zoe es una organización que operaba hace poco más de cinco años y que se presentaba en sociedad como una compañía de coaching y liderazgo. La empresa ofrecía devoluciones sobre la inversión con valores inéditos, varias veces por encima de cualquier otro negocio conocido. Cuando una persona realizaba un aporte, ese dinero quedaba inmovilizado por un año. A cambio, el cliente recibía un 7,5% en dólares cada mes, lo que sería la rentabilidad del negocio.
Denuncias contra la fiscal y la Provincia
En otro tramo de la entrevista televisiva, Cositorto dijo que avanzará con una denuncia contra la fiscal que investiga las presuntas estafas, Juliana Companys, y el Estado cordobés.
"Ahora, hay una denuncia contra la fiscal Companys y la próxima es contra la Provincia, porque hay un círculo rojo de corrupción absoluto en Córdoba. Córdoba Bitcoin y Bitcoin Argentina, más todo el Poder Judicial que nos ataca, nos termina generando un perjuicio, solamente en criptomonedas, de 156 millones de dólares."
Para agrandar la base de clientes, desde Generación Zoe utilizaban el esquema Ponzi y se les advertía a los clientes que esa ganancia garantizada podía crecer si la persona presenta dos, tres o más "inversionistas" a la red.
El problema que se generaba es que todo el tiempo era necesario sumar nuevos socios para no ser estafado. Cada vez que alguien subía de nivel, otras personas —y su inversión— se incorporaban debajo, a la espera de subir también al siguiente nivel.
Por el caso ya hay 20 detenidos. Solo queda prófugo el ex juez Héctor Yrimia, arquitecto legal del conglomerado de firmas cuyo rostro visible era Cositorto.