Cambió su DNI para ser "Horacia Eduarda" y la acusan de mal uso de la ley de género
Una persona cambió su DNI para ser llamada "Horacia Eduarda" y un organismo oficial critica esta decisión como un mal uso de la ley de género.
Se trata de la Subsecretaría de Diversidad de Neuquén, dependiente del Ministerio de Mujeres y Diversidad, que se manifestó en contra del cambio de género de esta persona porque consideró que es un padre que tomó esta decisión con el fin de poder ver a su hija, aunque el cambio registral no le garantizaría esto.
Antes del cambio de género, su nombre era Eduardo Becerra. Esta persona fue denunciada por su ex pareja y posee una restricción judicial que le impide acercase a su hija.
Becerra contó que estaba cansado de las denuncias que su ex mujer le hacía por violencia de género y que "siempre tuvo todas en contra por ser varón". Entonces, le consultó a su abogado si siendo mujer lo podría representar mejor, a lo que el letrado le confirmó que sí.
"Así que fui, hice los trámites de cambio de género y le dije: ‘representame como mamá'", relató Becerra.
La rectificación la consiguió en los últimos días de diciembre y el documento llegó hace dos días.
"Ahora somos dos mamás", dijo Becerra.
Según su razonamiento, el cambio de sexo implicaría que ahora su ex pareja no podrá hacerle más denuncias por violencia de género y que si quiere hacerlas deberá presentar pruebas.
Respecto a las críticas que recibió por el mal uso de la ley de género, Becerra dijo: "Yo quería con todo anhelo ser mujer para ver a mi hija. Quiero tener los mismos derechos que la mamá".
"Yo tengo toda la libertad de cambiar de género cuando yo quiera. La ley de género dice que vos podés cambiar de género y nombre, así que puedo hacerlo. No me quiero operar ni vestir como mujer, tampoco dice que tengo que salir con hombres para validarlo", describió sobre la legislación.
En la Subsecretaría de Diversidad de Neuquén dijeron: "Repudiamos enfáticamente la acción realizada por una persona que reconoce haber modificado su género con el único fin de volver a contactarse con su hija, respecto de quien posee una restricción judicial, como él mismo ha reconocido".
"Conductas como la señalada constituyen una afrenta a los derechos humanos reconocidos por la ley. Además, alteran los valores que sostienen la normativa generando una distorsión que no debe ser permitida ni tolerada por los órganos de aplicación", explicó Mariana González, abogada y asesora legal de la Subsecretaría.
En tanto, la directora General de Promoción de Derechos, Alejandra Rodríguez Carrera, manifestó que "este tipo de actos constituyen una degradación a la historia y las acciones sostenidas históricamente por el colectivo LGBT+" y agregó que "alienta descalificaciones sociales que se sirven de acciones como la expuesta para generar ámbitos de violencia y discriminación hacia el colectivo".