Sanidad concretó un paro por turnos en sanatorios y clínicas: aún no asoma una solución al conflicto
Tras vencer este jueves el plazo de la conciliación obligatoria, la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA) concretó un paro de cuatro horas por turnos en las instituciones de salud privada de todo el país por la falta de acuerdo salarial con las autoridades de la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS).
La medida de fuerza estuvo acompañada de manifestaciones en las puertas de todos los centros de salud privados afectados, luego de que, en los 15 días que duró la conciliación, el Ministerio de Trabajo no lograra acercar posiciones entre las partes.
El Gobierno se encuentra abocado a acordar con las empresas del sector un plan para mejorar su financiamiento, que se resintió por los gastos por la pandemia, para luego sí poder sentar en una mesa al gremio y destrabar la paritaria. Pero la solución está llevando más tiempo del estimado y el sindicato de las enfermeras y camilleros está expresando su malestar por la demora.
Dónde y cómo se manifestó la medida
El paro se registró en instituciones como el Sanatorio Sagrado Corazón, Sanatorio Santa Bárbara, Instituto Fleni, Clínica Baztarrica y Sanatorio Finochietto, Sanatorio de la Trinidad (Mitre), Sanatorio Güemes, Clínica Alcla, Clínica de la Esperanza, Centro Gallego, Hospital Alemán, Sanatorio San José, Hospital Español, Clínica Zabala, las clínicas de Medicus y Emergencias, entre otras.
Y se organizó de la siguiente manera: por la mañana desde las 10:00 hasta las 14:00 de la tarde de este viernes; desde las 18:00 hasta las 22:00; y de noche, desde las 00:00 hasta las 4:00 de este sábado.
Se trató de una medida similar a que la estaba prevista para los días 1 y 2 de julio, que finalmente quedó en suspenso tras dictarse la conciliación.
El sindicato que comandan Carlos West Ocampo y Héctor Daer exige un aumento salarial de entre un 43 y un 45% según la nueva pauta establecida por otros gremios. Sin embargo, los prestadores privados aseguran que para eso es necesario que el Gobierno autorice el aumento en las cuotas de la medicina privada.
En Twitter, se pronunció Daer: "Hoy los trabajadores de Sanidad paramos en todo el país. Con la fuerza de nuestra organización y el apoyo de la sociedad, alzamos nuestro legítimo reclamo por una recomposición salarial urgente. Sin Salario No Hay Salud", escribió.
Hoy lxs trabajadorxs de Sanidad Paramos en todo el país.Con la fuerza de nuestra organización y el apoyo de la sociedad, alzamos nuestro legítimo reclamo por una recomposición salarial urgente.Hoy lxs trabajadorxs de Sanidad ratificamos que #SinSalarioNoHaySalud. pic.twitter.com/FNRDDL2z6f — Héctor Daer (@hectordaer) July 23, 2021
La pelea salarial entre FATSA y las cámaras empresarias se inició hace varias semanas cuando el sector exigió ante Trabajo la suspensión de las paritarias asegurando que no podían afrontar subas salariales, debido a la falta de financiamiento y de autorización a una suba de sus cuotas y servicios.
En ese marco fue que Sanidad inició un plan de lucha con movilizaciones, asambleas y paros: "Los tiempos de gestión y negociación se agotaron. Vamos a llevar adelante este plan de lucha para alcanzar nuestra justa y legítima recomposición salarial", sosteuvo el gremio en el inico del conflicto.
Gobierno vs. salud privada
La posición del Gobierno ante la medicina privada suma tensión al conflicto, ya que retrasa los aumentos a las clínicas de prepagas a punto tal que el último incremento lo tuvo que autorizar la Justicia.
Mientras, la vicepresidenta Cristina Kirchner lanzó su idea de "integrar" las prepagas, con los hospitales públicos y las obras sociales.
El dueño de Swiss Medical, Claudio Belocopitt, denunció que el Gobierno "desfinancia" a las clínicas privadas para tratar de hacerlas quebrar.
De esta manera, dijo que el desfinanciamiento del sistema de salud privado llegó a un punto tal que la situación podría colapsar "de hecho" en tres semanas, cuando el gremio ya no resista las instancias de negociación.
Hace diez días, la UAS se presentó ante la Justicia para pedir una medida cautelar tras la negativa del Gobierno de autorizar un aumento de sus cuotas en un marco de alta demanda de los servicios sanitarios y de incremento de sus insumos.
"Queremos transmitir y contar a toda la sociedad el estado de situación y decirles que bajo estas circunstancias el sistema tal cual millones de conciudadanos han elegido voluntariamente, no está en condiciones de seguir funcionando", expresó.
"Si alguien decidiera tomar de hecho el sistema de salud privado, primero debería desfinanciarlo, ponerlo al límite de su capacidad operativa, arrodillarlo y mantenerlo así hasta que colapse y su capacidad de atención sea deficitaria. Entonces sobre los escombros, las ruinas y la salud de millones de argentinos, se expondría como un relato la excusa perfecta de que debe nacionalizarse bajo el supuesto de que el sistema no está en condiciones de dar respuestas sanitarias", había previsto Belocopitt en la conferencia de la UAS.