Confidencial: crece el temor de Larreta en su propio territorio y las encuestas arrojan datos preocupantes
Se despachó dos rivales de fuste. Primero a Patricia Bullrich en Ciudad, a muy bajo costo, y después a Jorge Macri en Provincia, pagando un precio mucho más alto. Pero ahí está, el PRO es suyo, Mauricio Macri se retiró para abocarse a sus defensas judiciales, mientras retoza en el Mediterráneo y padece un sufrimiento que los de a pie desean: estar varado en Suiza, sin problemas de límites en sus tarjetas de crédito.
Horacio Rodríguez Larreta se adueñó de la estructura del partido amarillo y desde esa plataforma se lanza a la presidencia en 2023.
Pero sus peores temores están en su propio distrito, el que le dio todo y al que gobierna hace ya seis años, sin contar los ocho que fue jefe de gabinete de Macri. La maniobra de reubicar a María Eugenia Vidal en la Ciudad a costa de Bullrich no fue gratis. La ex gobernadora sufrió una dura caída en su imagen a causa de su "asiento electoral variable". Las encuestas que se manejan en la sede imperial de Uspallata son preocupantes.
En una de ellas puede leerse que la imagen positiva de Vidal cayó 7 puntos porcentuales cuando se consolidó como candidata, algo que es el fenómeno inverso a lo que suele que ocurrir. Cuando alguien insinúa su candidatura lo hace con el fin de "otear el horizonte" para ver cómo está perfilado. Si las cosas vienen bien se lanza, y cuando esto ocurre, su imagen se consolida y crece. No fue el caso de Mariú.
El destrato a Bullrich jugó un rol. El diferencial de imagen de Patricia era inferior al de Vidal, pero eso no quiere decir, que no tuviese una positiva importante y mucha gente queriendo votarla. Bajarla como se la bajó, tiene un costo con cierto electorado que en la CABA no es poco y van a hacérselo pagar a Larreta y a Vidal.
Todavía nada indica que el único contendiente interno de la ex gobernadora, Ricardo López Murphy, genere un riesgo de derrota, pero los estudios de campo lo muestran con una intención de voto impensada hace un mes y en crecimiento, fruto de un mix entre el voto libertario que lo ve poco serio a Javier Milei y el voto "venganza" de los seguidores de Bullrich, que van a hacer lo imposible para debilitar a Vidal.
La maniobra que el jefe de gobierno porteño considera hoy su mayor éxito político, puede poner en juego la sede misma de su imperio. Una encuesta con números genéricos, sin dividir los candidatos por espacio político, de una consultora a la que los operadores porteños respetan y mucho, porque se ha equivocado muy poco en el pasado, dice que hoy, en la PASO, Vidal se llevaría 27,5% y Leandro Santoro, el casi seguro candidato del Frente de Todos, 25,5%. Que Vidal esté solamente dos puntos arriba de Santoro en la Ciudad, muestra la debilidad de la candidata.
Tercero, la encuesta coloca a López Murphy, con el nada despreciable porcentaje de 14 puntos y cuarto Milei con 8,1%. Es cierto, el Bulldog va por adentro del frente opositor liderado por Larreta, pero la pregunta que se hacen en Uspallata es ¿que conviene más? Si hacen una campaña fulminante y Vidal aplasta al veterano economista, y este no alcanza la minoría como para integrar la lista para la general ¿Dónde van sus votos en esa general? ¿A Vidal o a Milei? Si adivinó.
Ahora bien, si la campaña se trabaja suavecita, para que López Murphy entre en la lista para la general, los votos libertarios y bullrichistas se contienen en la figura del economista, pero Vidal se muestra débil, una figura pobre, poco relevante, de un espacio acostumbrado de duplicar a sus rivales en la Ciudad.
Algunos vaticinan una elección complicada, de tercios, con un Milei alimentado por el descarte de López Murphy, y un Santoro que busca no solamente ser diputado, sino el próximo candidato a jefe de gobierno por el espacio kirchnerista, el primero que pueda dar pelea, desde su origen e idiosincrasia radical, que pueden entender mejor la lógica del elector capitalino.
La elección tiene otra problemática para Larreta y su PRO. Si bien los radicales metieron a Martín Tetaz como segundo en la lista, todavía están en discusión los cargos debajo de él, y pretenden al menos un candidato más para entrar, probablemente Carla Carrizo.
Si logra colocarla en cuarto lugar, va a trabajar la elección para asegurarse que ingrese a la Cámara baja. Pero si la negociación no prospera, por ejemplo porque Elisa Carrio impone a Paula Oliveto Lago "nosotros no vamos a movilizar ¿para que?, Tetaz está adentro aunque nos quedemos todos en casa, y no hay esfuerzo que nos permita meter una candidata que va sexta. Que Vidal saque lo menos posible y deje de andar jodiendo con la jefatura de gobierno en 2023", dice el veterano armador de boina blanca.
El panorama imaginado por Vidal no es tan pacífico ni tan florido como esperaba. "Se fue de la Provincia y vino a meterse acá pensando que llegaba con una rienda en cada mano, se va a sorprender" explicó alguien que todavía mastica resentimiento, muy cerquita de Bullrich.