Cristina Kirchner: subastaron su auto presidencial y nadie lo quiso comprar
El Audi blindado que Cristina Kirchner utilizó como vehículo presidencial durante su primer mandato y parte del segundo se subastó, pero nadie lo quiso comprar. Luego de varias horas, el lote quedó vacante por falta de ofertas.
La subasta se realizó a través de la compañía Narvaez Bid. En la página donde se mostró el auto se registraron más de 3.500 visitas. Ante la realidad de la falta de compradores, la unidad volverá a la flota de Volkswagen Argentina, compañía a la que pertenece.
Los autos del Estado
El auto por el cual pedían $2.275.000 en la subasta, fue cedido en préstamo a la Casa Rosada para que la mandataria se desplazara en este lujoso modelo blindado. El viejo A8L permaneció en la flota de presidencia hasta diciembre de 2015 cuando el entonces nuevo presidente Mauricio Macri ordenó devolver al Grupo VW todos los autos prestados.
Durante su presidencia, el expresidente de Cambiemos se desplazó en vans ejecutivas como Chrysler Town&Country y Kia Carnival, hasta que en agosto de 2018 recibió la Mercedes-Benz Vito blindada. La camioneta aún es parte de la flota del Estado. Actualmente, es utilizada por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.
El auto que nadie quiso comprar es un Audi A8 4.2 FSI Quattro producido en 2007. El dominio está radicado en Tigre, provincia de Buenos Aires. En un primero momento pidieron $2.800.000. Pero como pasaban los días y no había ninguna oferta, bajó a $2.275.000. Aunque tampoco tuvo éxito.
Entre los detalles del auto, especificaban que se blindó en enero de 2008 y el blindaje tiene todavía seis años de vigencia. Además, precisó que el kilometraje "no es legible" y que la carrocería está "regular". Además, el motor no arranca y es posible que tenga algunos faltantes. El número de motor es BVJ010766 y el de chasis, WAUMV44E17N019523.
Dura carta de Cristina por el primer año del Gobierno
La vicepresidenta Cristina Kirchner criticó con dureza a la Corte Suprema de Justicia al señalar que el Poder Judicial es "ejercido por un puñado de funcionarios vitalicios" y remarcó que es el único que "no va jamás a elecciones".
La ex mandataria se expresó así al publicar en su web oficial y en sus cuentas de las redes sociales un balance sobre el primer año de gobierno del presidente Alberto Fernández, en el que sostuvo que "de aquella Corte" reformada en 2004 "no queda absolutamente nada".
Bajo el título "A un año... balance", llevo adelante un repaso de su trabajo a cargo del Senado, destacando que la Cámara alta sesionó 32 veces y que se aprobaron 40 leyes.
Por otra parte, resaltó que "en su ámbito, el Poder Ejecutivo sin duda ha hecho un gran esfuerzo para afrontar dos tragedias. Una anunciada y otra inesperada. La primera: la economía arrasada del macrismo. La segunda: la pandemia inédita".
En este sentido apuntó, como en varias ocasiones, contra la gestión encabezada por Mauricio Macri, especialmente cuando hizo referencia a tener que manejarse con "un sistema de salud practicamente abandonado por el macrismo", el que "se logró reestrucuturar en un 99% la deuda externa en manos de bonistas privados que, como ya sabemos, dejó el gobierno de Cambiemos".
Sin embargo, el foco estuvo hecho en la Corte Suprema, sobre la que advirtió: "Representado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la actuación de ese poder no hizo más que confirmar que fue desde allí desde donde se encabezó y dirigió el proceso de Lawfare", y agregó que "de los tres poderes del Estado, solo uno no va a elecciones. Solo un Poder es perpetuo. Solo un Poder tiene la palabra final sobre las decisiones del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo".