Por qué es una pésima idea mezclar pepino y tomate
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Las ensaladas son un de las guarniciones más populares y sencillas de preparar. Se pueden hacer con casi cualquier ingrediente y las combinaciones son infinitas. Incluso es posible preparar ensaladas más cargadas y abundantes para pasarlas de guarnición a plato principal.
Ahora bien, no todas las combinaciones son buenas para la salud. De hecho, una de las más frecuentes podría tener un impacto negativo en el cuerpo. ¿Cuál? El tomate y el pepino, dos vegetales que, en apariencia y gusto, se complementan perfectamente, pero que no se deberían mezclar.
Este es el por qué
Es probable que hayas escuchado que no hay que mezclar tomates y pepinos. También es probable que jamás hayas escuchado esta recomendación. Lo cierto es que hay muchas personas que consideran sabrosa la combinación de estas dos verduras para el diseño de sus ensaladas o guarniciones.
En cualquier caso, el motivo es muy sencillo y responde a las características de cada uno de esos vegetales.
La respuesta a este interrogante está en el tiempo de asimilación. No todos los alimentos poseen el mismo tiempo de asimilación en el cuerpo; esto es, el tiempo en el que se digieren, se procesan y pasan sus nutrientes al organismo.
Por las características de cada producto, algunos necesitan más tiempo para ser digeridos que otros.
Generalmente cuando se mezclan alimentos de asimilación lenta con alimentos de asimilación rápida, el proceso de la digestión se dificulta. Los alimentos de asimilación rápida pasan al intestino mientras que los otros pueden quedar "estancados" en el estómago hasta que los de digestión lenta finaliza su proceso.
¿Cuál sería la consecuencia?
Cómo el proceso de digestión se hará de forma diferida, los azúcares y el almidón de los alimentos se fermentan en el interior del cuerpo, las grasas se ponen feas y las proteínas se absorben. De esta manera, los alimentos que las personas ingieren se aprovechan menos que si se consumieran en distintos momentos.
Otras graves consecuencias que conlleva mezclar mal los alimentos, como sucede con el pepino y el tomate, es que pueden causar dolor de estómago, náuseas, gases, inflamación del abdomen.
Es por eso que resulta importante considerar las características de los productos al momento de mezclarlos para consumirlos. Sobre estos dos en particular, es esencial recordar que los pepinos se digieren rápido mientras que los tomates fermentan en el estómago.
Otros alimentos que no deben mezclarse son las frutas con las comidas, ya que estas son de absorción rápida. Es por eso que lo ideal es consumirlas varias horas después de haber almorzado o comido la cena.
El hecho de combinar almidón con proteínas es otro error que las personas suelen cometer. Por ejemplo, comer pan con carne o pollo en un sandwich. ¿Por qué es un error? Porque el cuerpo procesa primero las proteínas, mientras que el almidón del pan permanece fermentado en el estómago por largas horas.
Para evitar la hinchazón o el malestar también se aconseja evitar mezclar legumbres con lácteos.
En general tampoco se aconseja combinar frutas con lácteos. Este tipo de combinaciones alteran la flora intestinal, lo cual puede desencadenar la liberación de toxinas.