Máscaras contra el coronavirus, pero no contra las salidas: permite beber y comer en bares y restaurantes
Las cuarentenas por la pandemia del coronavirus están empezando a flexibilizarse en muchos países, pero las personas, y los negocios, tienen que acostumbrarse a un nuevo estilo de vida: distanciamiento social, barbijos o tapabocas y, por qué no, protectores faciales completos.
Esa es la idea de un grupo de diseñadores italianos que crearon un sistema inflable, con cobertura de 180 grados, para ser usado o distribuido en bares y restaurantes para poder comer y beber utilizando protección.
El casco/máscara, bautizado Soffio (soplo en italiano) fue creado en conjunto por MARGstudio, Alessio Casciano Design y Angeletti Ruzza. Tiene un estilo parecido a las máscaras plásticas que en muchos países se están utilizando, por sobre el barbijo, pero la protección es de 180°: cubre toda la parte delantera de la cabeza para crear un "espacio personal protegido", explicaron.
Lo interesante de la propuesta es que esperan que se pueda fabricar por menos de un euro, algo ideal para que cualquiera lo pueda comprar o incluso para que los locales gastronómicos los distribuyan en la entrada para que la gente pueda volver a consumir.
"El Soffio permite continuar realizando las acciones de beber y comer exactamente como lo hicimos antes, pero de manera segura", dijo Annalisa Grasselli, de MARGstudio, subrayando que el protector "no cambia nuestras formas de experimentar la vida social en restaurantes o bares", indicó TN Tecno.
Plazas, ramblas y parques: ¿cómo es el "plan" que restaurantes y bares presentaron a la Ciudad?
on el foco puesto en alcanzar cuanto antes una luz verde comercial que consolide de alguna forma la supervivencia de los comercios, los restaurantes y bares de la Ciudad siguen pensando estrategias y modalidades de funcionamiento que les permitan reabrir sus puertas en el mediano plazo.
Aunque reciben ayuda estatal para cubrir la mitad de cada uno de los salarios, los empresarios del rubro ya dan por descontado que no podrán hacerse cargo del 25 por ciento restante -llegaron a un acuerdo para abonar el 75 por ciento de los sueldos- en junio a partir, justamente, del ingreso cero que sigue generando el veto a la actividad.
A partir de esa certeza, desde el segmento acercaron al área de Desarrollo Urbano de la Ciudad un esquema de funcionamiento que, ya en evaluación entre las filas del oficialismo porteño, podría destrabar el veto que rige sobre la gastronomía en general en esta parte de la Argentina.
En concreto, fuentes de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (AHRCC), organización que reúne a más de 8.000 establecimientos en Capital Federal, indicaron a iProfesional que la entidad presentó un nuevo protocolo que contempla la instalación de mesas y sillas en áreas verdes como plazas, ramblas y parques.
En simultáneo, la propuesta también propone la colocación de "decks" para extender las veredas en determinados puntos comerciales de la Ciudad. Tal como ya ocurre en algunas cuadras de barrios como Palermo, la AHRCC propone que esa opción se haga extensiva a determinados tramos en Almagro o Caballito, Congreso o determinados sitios del microcentro.
Siempre desde la perspectiva de respetar las distancias y evitar las aglomeraciones, los comerciantes reconocen que una variante de funcionamiento así favorecerá mayormente a restaurantes y bares pero dejará afuera a ítems como las cervecerías, grandes víctimas comerciales de la pandemia en tanto suelen ser comercios en los que se reúnen enormes grupos de personas.
"Pedimos ampliar la instalación de mesas y sillas en áreas públicas, que la atención fuera de los locales sea mucho mayor. Sería una opción más redituable respecto de abrir con menos capacidad en el interior. Para muchos restaurantes o bares volver a operar pero con limitación de clientes directamente les generará más pérdidas. Consideramos que se puede aplicar sin problemas en determinadas zonas de Puerto Madero, Costanera, Palermo, por mencionar opciones", dijo a iProfesional Ariel Amoroso, presidente de la AHRCC.
Justamente Puerto Madero es una de las zonas más afectadas por la expansión del Covid-19 en tanto su oferta gastronómica depende en gran medida de la actividad turística, rubro que recién comenzaría a mostrar cierta recuperación a partir del 2021.
El recurso del "deck"
"Lo que se propone es algo que ya se aplica en países como España o Lituania. Podría, por ejemplo, aprovecharse determinados espacios en áreas como los parques Centenario o Rivadavia. Pensemos en todos los bares y restaurantes que funcionan en sus inmediaciones y hoy están cerrados", añadió.
Amoroso también se refirió a la instalación de "decks" para ampliar las veredas con el fin, también, de orientar la gastronomía a la atención puertas hacia afuera.
"Enfrente de muchos comercios puede generarse más espacios para mesas y sillas a partir de apliques de madera, como en algún momento se vio por Palermo. Por supuesto que sin descuidar las distancias y la desinfección, no queremos que ocurra algo como en Alemania, donde se abrió la cuarentena y la evolución de la pandemia obligó a volver a imponer restricciones muy duras", aclaró.
Por último, Amoroso descartó que se pueda recurrir a la modalidad de separación con mamparas y plásticos transparentes implementada, también, en algunas zonas comerciales de Europa. "Consideramos que el protocolo que proponemos es lo suficientemente seguro para no tener que recurrir a medidas de esas características", concluyó.