Cuánto cuestan las cirugías plásticas en Argentina
Con la devaluación de la moneda que siguió en la Argentina a la crisis social y política de 2001, comenzó un fenómeno particular que perdura hasta el día de hoy: un "boom" del turismo médico, sobre todo de extranjeros que vienen al país a hacerse cirugías plásticas por un precio mucho más bajo que el que encuentran en sus países de origen.
Según lo describe Reuters, el "boom" fue sobre todo de los implantes mamarios y comenzó a fines de 2002, cuando la Argentina salía del colapso financiero.
Desde entonces muchas compañías de cirugías y de turismo estético han surgido y ofrecen no solo consultas con los principales especialistas del país, sino paquetes enteros que incluyen el alojamiento para los días de recuperación y tours en una variedad de destinos.
En aquel momento, un "lifting" –una operación para reducir las marcas del paso del tiempo en el rostro- costaba alrededor de 15.000 dólares en los Estados Unidos y cerca de 5.000 en Argentina. Más aún, una combinación de liposucción –extracción del tejido graso del cuerpo- y colocación de implantes mamarios podía conseguirse en torno a los 3.700 dólares.
Hoy por hoy, según publicaron algunos medios de comunicación, la diferencia de precio para realizarse una rinoplastia o una mamoplastia de aumento, es de alrededor del 50% del costo que se paga en Estados Unidos o Europa.
Los visitantes que llegan atraídos por los cirujanos calificados y bajos costos de las cirugías, gracias al cambio favorable al dólar y al euro, son de Estados Unidos, Europa y Canadá, aunque también se han visto personas cruzando desde Chile y Paraguay con el mismo objetivo.
Tanto evolucionó este negocio que desde el ente de Gobierno dedicado a la promoción turística de la Argentina, generaron iniciativas para potenciar al país como destino destacado del turismo medicinal.
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Y ese trabajo rindió sus frutos: en 2019 la Argentina se metió en el "top 10" de países en los que se realizan mayor cantidad de cirugías estéticas.
De acuerdo al cálculo que difunde anualmente la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (Isaps, por sus siglás en inglés), con 680.960 procedimientos (entre quirúrgicos y no quirúrgicos) en 2018, la Argentina quedó en el séptimo puesto a nivel mundial, por encima de Colombia, Australia y Tailandia. Las primeras posiciones en el ranking las ocuparon Estados Unidos, Brasil, México, Alemania, India e Italia, en ese orden.
Pero más allá de este éxito en los negocios y del prestigio de los profesionales locales, quienes se realicen cirugías estéticas en la Argentina deben tomar precauciones, ya que como en cualquier intervención médica, hay riesgos.
¿Qué costos se deben tener en cuenta en una cirugía plástica?
Los precios de las cirugías plásticas varían en función de diversos factores que determinan los costos.
En principio, la clínica o sanatorio elegido debe estar autorizado para realizar el procedimiento correspondiente.
El establecimiento que se elija, el equipo de profesionales que realizará la operación, si es necesario permanecer internado y si es clave que el paciente concurra acompañado o puede hacerlo solo, serán algunos de los factores a tener en cuenta.
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La Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS, por sus siglas en inglés) recomienda, al consultar los honorarios del cirujano y su equipo, seleccionarlo muy cuidadosamente: "Interésese e investigue sus cualificaciones profesionales, su reputación, referencias, así como su experiencia, sobre todo cuando tengan tarifas que son significativamente menores que las de otros cirujanos".
Esta entidad sugiere además consultar ¿qué formas de pago acepta el cirujano?, ¿qué opciones de financiación externa hay?, y si se reembolsarán parte o todos los honorarios en caso de cancelación de la cirugía.
En general el precio de la clínica varía entre los 400 y 1200 dólares según las horas de cirugía y el tipo de anestesia utilizado.
También cambia el costo final si se trata de una operación que requiere de implantes (mamarios, de glúteos, etc.) y en ese caso no solo hay que comprarlos sino que es necesario elegir entre distintas calidades y precios. Para hacer el procedimiento en la Argentina, el implante debe ser además uno de los autorizados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
El precio de los implantes en Argentina es variable y en general van entre 700 y 1400 dólares. Algunas marcas ofrecen garantía de por vida para cambiar los implantes sin volver a pagar por ellos. Lo mismo en caso de rotura de implantes o contractura capsular.
Por último, el precio variará de acuerdo a su se realizan consultas pre y postoperatorias, consultas domiciliarias, tratamientos complementarios, exámenes pre quirúrgicos, medicación y el tiempo de internación.
ISAPS suma otro punto importante: en los casos en los que la cirugía plástica o estética sea electiva, puede ocurrir que no esté cubierta por un seguro. "Debido a que una complicación puede darse incluso con el cirujano más cualificado, puede ser útil explorar las opciones del seguro médico de antemano".
¿Qué consultarle al cirujano plástico, además del precio?
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Pese a que la Argentina está entre los cinco países de la región donde más cirugías estéticas se realizan, es normal que los pacientes tengan dudas sobre los procedimientos, los costos y se asesoren antes de tomar una decisión que puede impactar su salud.
La variedad de procedimientos que pueden practicarse y las tecnologías que se aplican en las cirugías plásticas han evolucionado en el tiempo, aunque aun así las personas siguen consultando cuánto salen intervenciones como la "lipoláser", un aumento mamario, aumento de glúteos, mini lifting facial (ritidectomia), lipotransferencia, rinoplastia, "lipo sin cirugía".
Se debe tomar en cuenta no solamente el precio del procedimiento sino también el de la internación, en caso de que la operación lo requiera, y prever el tiempo que demora la recuperación. Esto se encarece, sobre todo, cuando el paciente debe trasladarse a otra ciudad o país para practicarse la cirugía.
Una vez tomada la decisión, el primer paso es conocer personalmente al cirujano plástico. La empatía es fundamental para sentirse a gusto y generar confianza mutua con el profesional médico. Una cirugía plástica es un trabajo en equipo.
Es recomendable llevar anotadas todas las preguntas que necesitemos hacer sobre el procedimiento, para entender y disipar miedos: ¿en cuántos pacientes realizó procedimientos similares?, ¿qué complicaciones tuvo?, ¿cómo se tratan las complicaciones?, ¿qué resultados puedo esperar?, etc.
El probable que el cirujano mida las proporciones y proyecte qué pueda mejorarse en cada caso para dar una estimación personalizada al paciente de qué resultado puede esperar.
Para eso puede tomar fotografías para medir y analizar, hacer ecografías, etc. Esto es fundamental en los casos de procedimientos "lipolaser", abdominoplastias, cirugías mamarias, etc.
Es muy común también que el médico cirujano realice también algún tipo de simulación digital, utilizando programas de software de avanzada, para mostrar cómo quedará el paciente tras la operación.
Muchos cirujanos ofrecen también fotos del antes y después de otros pacientes en los que han realizado operaciones similares, para que quien consulta se lleve una idea de cómo será el proceso, qué recuperación será necesaria y qué puede ocurrir al completar el proceso.
Y en el caso de que se trate de un procedimiento con implantes, vale la pena conocer cómo son, tocarlos o probarlos, para entender su tamaño y consistencia.