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Cuál es el salario mínimo en los países de la región y cómo se desplomó la Argentina en el ranking

Un relevamiento muestra cuál es actualmente el salario mínimo en la Argentina y cómo quedó conformado el ranking regional, país por país
19/02/2020 - 16:55hs
Cuál es el salario mínimo en los países de la región y cómo se desplomó la Argentina en el ranking

Tras la última modificación, que tuvo lugar durante la presidencia de Mauricio Macri, el salario mínimo vital y móvil en la Argentina pasó a ser de $16.875.

Así, tras ese incremento, a lo largo de la gestión de Cambiemos, el salario mínimo pasó de $5.588 en diciembre de 2015 a los $16.875 actuales.

En la práctica, se trató de un incremento del 200%. Sin embargo, como contrapartida, durante ese mismo lapso, la inflación fue de casi 300%. Es decir que el salario mínimo perdió por mucho frente al avance de los precios.

Cuál es el salario mínimo en los países de Latinoamérica

Ahora bien, al cruzar este dato con el tipo de cambio, es posible analizar cómo fue variando el salario mínimo de la Argentina (en dólares) frente al conjunto de países de Latinoamérica y cómo fue variando su posición en el ranking.

De acuerdo con un análisis realizado por la Universidad de Avellaneda, en noviembre de 2015 la Argentina tenía un salario mínimo de 580 dólares, superando de esta manera el resto de los países de la región.

En segundo lugar se ubicaba Ecuador, con 354 dólares, y era seguido por Chile, Uruguay, Paraguay y Bolivia. Venezuela y Brasil, en tanto, se ubicaban en la última y penúltima posición.

Sin embargo, remarca la casa de estudios, "la situación empieza a cambiar radicalmente a partir de diciembre de 2015 pero particularmente durante 2018, con la devaluación del 120 por ciento". A esto se sumó el salto que experimentó el billete verde a lo largo de 2019, del orden del 62 por ciento.

Como consecuencia de este movimiento del tipo de cambio, que abarató los precios de los bienes y servicios en esa moneda, la Argentina pasó del primer puesto a perder posiciones aceleradamente, hasta alcanzar la posición número 11.

¿Cómo quedó conformado entonces el ranking del salario mínimo en los países de Latinoamérica?

En primer lugar está Costa Rica, con un salario mínimo de u$s560. Le siguen Uruguay (u$s434), Ecuador (u$s400), Guatemala (u$s391), Chile (u$s387), Paraguay (u$s338), Bolivia (u$s307), Perú (u$s277), Honduras (u$s272), Panamá (u$s270) y la Argentina (u$s268).

Los únicos países que hoy tienen un salario mínimo por debajo de la Argentina son Colombia (u$s261), Brasil (u$s244) y Venezuela (apenas u$s6).  

"A su vez, podemos observar que mientras en algunos de estos países el SMVM ha subido, en términos de dólares en los últimos meses, el de Argentina no se ha recuperado y corre el riesgo de ingresar en un nuevo periodo de descenso", advierten desde la UNDAV.

A continuación el ranking con los salarios mínimos de los países de Latinoamérica:

Ranking del salario mínimo en los países de Latinoamérica

Los analistas de la UNDAV señalan que, desde la asunción de Mauricio Macri el 10 de diciembre de 2015, el salario mínimo experimentó "un descenso muy marcado a causa de las continuas devaluaciones y la alta inflación".

Así, "a fines de 2015, el salario mínimo era cercano a los 590 dólares mensuales, el más alto de la región. Hoy se ubica en la posición undécima retrocediendo diez posiciones". Esto implicó una caída, en dólares, del orden del 54,5%, como se puede ver en el siguiente gráfico: 

Evolución del salario mínimo en dólares en la Argentina

En el caso de Venezuela, que ocupa la última posición, con un nivel de apenas u$s6, desde UNDAV destacaron que este país caribeño fue el que sufrió la tasa de devaluación más alta, al tiempo que atraviesa una fuerte crisis económica, social y política.

Salario mínimo en países de Latinoamérica: ¿es suficiente?

Desde la Universidad de Avellaneda destacan que "en la mayoría de los casos hubo avances", excepto en la Argentina.

Sin embargo, los salarios mínimos de la región "siguen siendo muy pobres para que los trabajadores y sus familias vean mejorar su calidad de vida", acotan.

"A enero de 2020, el salario mínimo de la región, en la mayoría de los países, sigue siendo insuficiente para satisfacer las necesidades de los trabajadores y de sus familias", remarcan.

Pese a esto, aseguran que la Argentina continúa teniendo indicadores salariales relativamente aceptables entre los países de la región, cuando se analizan otros criterios de salarios.

"Realizando el análisis desde otra dimensión, el salario medio, que es la cantidad de dinero que percibe el trabajador en un país determinado durante un periodo de tiempo. Particularmente, Argentina mejora su performance ubicándose en el séptimo lugar", concluyen.

El salario mínimo vital y móvil se vio afectado por la devaluación

Salario mínimo vital y móvil: ¿qué es?

El salario mínimo vital y móvil (SMVM) es una de las instituciones más antiguas del mercado laboral (más del 90% de los países tiene legislación sobre este tema) y se define, según la Ley de Contrato de Trabajo (artículo 116), como "la menor remuneración que debe percibir en efectivo el trabajador sin cargas de familia, en su jornada legal de trabajo, de modo que le asegure alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión".

Además, según UNDAV, tiene rango constitucional ya que lo consagra el artículo 14 bis de la Constitución Nacional. En el caso de los trabajadores registrados que negocian condiciones a través de convenios colectivos de trabajo, los acuerdos salariales suelen superar el salario mínimo vital y móvil vigente, con lo cual "a lo sumo les sirve como un parámetro más de comparación en las negociaciones colectivas".

El salario mínimo se movió por debajo de la inflación en los últimos años 

Salario mínimo en la Argentina: ¿por qué cayó?

Los analistas de UNDAV advierten que el derrotero argentino en los últimos años tuvo una dinámica dramática.

"Tras el pico del tercer trimestre del año 2015, la caída fue sistemática, con la mera excepción de la última parte de 2016 y cierta estabilidad en el año 2017. A partir de ahí, la merma fue dramática", remarcan.

Sucede que "el precio del dólar es determinante del nivel de variación de los precios internos, con impacto en la producción, la distribución del ingreso y el empleo", según los analistas de la UNDAV.

Y la caída no fue únicamente en términos de dólar. Dado que el salario mínimo vital y móvil se movió por debajo de la inflación, esto significó una fuerte pérdida del poder adquisitivo.

Según en todo el periodo de cinco años, de punta a punta su capacidad de compra se deterioró 23,6%, y desde el valor más alto (agosto 2015), un 26,8%.

"Si ya de por sí en general el salario mínimo vital y móvil no alcanza a superar el umbral de la pobreza de ingresos medida por el INDEC, el enorme deterioro acontecido afectó aún más a los sectores de menores ingresos", advierten desde UNDAV.

Además, advierten que este indicador se puede seguir deteriorando: "La tendencia macroeconómica actual, signada por las urgencias de la deuda externa, no hace pensar que los asalariados puedan recomponer niveles de ingresos perdidos en un intervalo de tiempo reducido. Sin embargo, el panorama general marca que el derrotero decreciente podría frenarse, y empezar a revertirse paulatinamente en algunos meses. Claro que este escenario está supeditado a que no se precipite la situación financiera, en un contexto donde las tensiones derivadas de la renegociación con el FMI y acreedores privados, imprime mucho ruido sobre el día a día de la vida económica argentina", indican.