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Los últimos bastiones del dinero en efectivo: ¿es posible derribarlos?

Cuáles son las razones por la que los billetes no terminan de desaparecer. Qué instrumentos podrían reemplazarlo. El caso de España y EE.UU.
02/07/2018 - 12:34hs

Uno de cada cinco europeos asegura que casi no usa dinero en efectivo. Sin embargo, otro dato de un sondeo realizado por ING muestra la otra cara de la misma moneda: más de un 80% sí utilizó billetes en los últimos tres días.

El estudio revela el estado de situación del dinero en efectivo: en retirada de los bolsillos de medio mundo pero aún parte de la mentalidad de la sociedad, publicó elpais.com.

Cuánto tiempo de vida le queda al efectivo es una pregunta recurrente, sobre todo, en Europa. Por caso, "Los últimos bastiones del efectivo y de cómo hacerlos caer", fue uno de los temas del foro No Money, organizado por el diario El Pais.

 

"Nunca acabamos de romper el círculo del uso del efectivo", apunta Pilar Clavería, asesora de Pagos, Operaciones y Procedimientos de la Asociación Española de Banca.

"La costumbre y el miedo a lo nuevo hace que no terminemos de abandonar nunca el dinero: siempre conservamos unos billetes en la cartera por si acaso", añadió.

"Los cambios son graduales, y uno no termina de eliminar al otro", señala, por su parte, Ángel Nigorra, director general de la Sociedad de Procedimientos de Pago, una empresa puesta en marcha por varios bancos españoles que gestiona la aplicación Bizum, una de las puntas de lanza del dinero digital en este país.

"Los ciudadanos siguen percibiendo el pago en efectivo como el más seguro, porque se siguen considerando los billetes como depósitos de valor", considera Santiago Carbó, director de Estudios Financieros de Funcas.

El ejemplo españolAunque España es uno de los países más ligados al uso del efectivo de Europa, para Pilar Clavería "hay una gran paradoja, y es que si hablamos de los usuarios, la sociedad española está mucho más preparada para la transformación digital que otros países, incluso los nórdicos".

"España es muy buen mercado, porque tiene un parque de puntos de venta muy bien establecido", defiende Nigorra. "En Churriana, que es el barrio de Málaga donde se hicieron las pruebas del euro en España por primera vez, hemos hecho una prueba y nos ha sorprendido que Bizum funciona para todos los perfiles de cliente", agregó.

Si hay una cosa que está clara, es que el punto de inflexión puede suceder en cualquier momento.

"Las cosas no volverán a moverse así de despacio", defiende Jim Marous, cofundador de The Financial Brand y experto en transformación digital. "Llevamos más de 10 años hablando de pagos con el móvil y aunque queda mucho para que la adopción sea masiva, estamos en el momento de la verdad", apunta David Alonso, director del área de Empresas de Samsung España. "Estamos en un momento de expansión y tenemos un objetivo común. No hemos venido a quitar usuarios: hemos venido a agilizar el mercado y a aportar valor a todo el mundo".

Para que ese punto de inflexión se supere, algunos miedos deben ser enfrentados. Uno de los principales es la ciberseguridad, máxime cuando se suceden los escándalos de vulneración de datos personales.

"Para las instituciones financieras el escenario es de guerra continua", considera Juan Loureiro, gerente de riesgos digitales y en IT de Deloitte. "Aunque les queda muchísimo por hacer, las entidades grandes y las estructuras críticas están invirtiendo mucho en mejorar sus capacidades de ciberseguridad. Mucha diferencia con las pymes, que, aunque la concienciación está aumentando, continúan muy atrás".

 

Otro tema es la presencia del dinero electrónico en el crimen. Aquí, las criptomonedas como el bitcoin son las principales sospechosas.

 

Mala imagenSin embargo, el sector está preocupado por la confusión entre herramientas como el blockchain (que, al fin y al cabo, es una base de datos) de ciberdivisas como el bitcoin que se sostienen en la tecnología.

"La idea de que 'el blockchain se utiliza para pagos opacos' tiene mucha publicidad porque genera mejores titulares. Es solo una parte muy pequeña, pero se tiende a confundir", señala Pablo Montoliú, director de información e innovación de Aon Risk Solutions.

 

El boom del bitcoin del año pasado —en el que la criptomoneda llegó a valer alrededor de u$s20.000— atrajo muchísimo interés hacia las criptomonedas y provocó el surgimiento de miles de rivales. "Hay un aluvión que irá debilitándose", señala Loureiro. "Irán sobreviviendo las criptomonedas más grandes", consideró.

Ante tremendo caos, vuelven a surgir voces que piden regular las criptomonedas.

"Como cualquier tecnología que tenga un efecto en la sociedad, debería haber límites de actuación dentro del sistema", indica Alejandro Touriño, director del master en Tecnología Legal en la Escuela de Derecho del Instituto de Empresa (IE). Touriño defiende que esta regulación no necesita ser específica.

 

Otros son más escépticos acerca de las posibilidades de regulación. "Bitcoin se creó para subvertir el sistema", apunta Delgado. "Nunca va a encajar en un mercado regulado".

"Hay aspectos de la tecnología de las criptomonedas que se puedan regular", considera Alexander Preukschat, nodo coordinador de Blockchain España. 

En todo caso, el sector va a prestarle mucha atención, porque las cibermonedas son una herramienta ante la progresiva desaparición del dinero en efectivo.

José María Mollinedo, secretario general del Sindicato de Gestores y Técnicos de Hacienda (Gestha), es escéptico acerca de las posibilidades del dinero electrónico. "Para lo que puede servir es para reducir el fraude menudo; el de vender sin factura, el del 'con IVA o sin IVA'", considera. "Pero las grandes bolsas de las multinacionales, que representan tres cuartas partes de la evasión, no van a ser afectadas".

 

Tanto los Gobiernos como el Banco Central Europeo están haciendo esfuerzos para reducir el peso del efectivo en las grandes transacciones, como la progresiva retirada del billete de 500 euros (uno de los de mayor valor nominal del mundo) y la obligatoriedad de la transferencia bancaria para transacciones a partir de una determinada cantidad. Pero, para Mollinedo, estos esfuerzos llegan tarde, publicó elpais.com. 

Demoras"En Estados Unidos se está tardando más en implementar una sociedad sin efectivo porque nadie se ha molestado en presentar una razón para cambiar el statu quo", sostiene Marous. "Los consumidores están demasiado mimados. Hay organizaciones que no solo han hecho que el procedimiento sea más fácil, sino que han buscado cuidar a los consumidores y recompensarlos".

 

Marous tiene un responsable. "Es el comercio electrónico el que está mostrando el camino", indica. "Si los bancos no hacen esto, Amazon y Google lo harán", añade.

El cofundador de The Financial Brand señala que los propios bancos se han ganado esta disrupción en sus negocios, centrándose más en su propia eficiencia y su cuenta de resultados que en la atención al cliente. "¿Conocen ustedes a alguien que diga: 'Hoy voy al banco' con alegría?", provoca Marous. "Generalmente lo que te dicen es: 'Hoy tengo que ir al banco', como si fuera una tarea pesada. ¡Y lo es!".