Los investigadores de la la denuncia de la diputada Elisa Carrió por presuntos sobreprecios en la obra pública durante la gestión de Daniel Scioli y pusieron su ojos sobre una maniobra efectuada desde el seno del poder para quedarse con dinero a través de un sistema de facturas truchas.
Uno de los hombres clave en este entramado sería Alberto Pérez, el exjefe de Gabinete sciolista. El exfuncionario daba la orden para que determinados "gastos extras" lleguen como caja chica a otras dependencias, entre ellas, la de su ex número dos, Walter Carbone, el "hombre del dragón".
La firma de este funcionario, de acuerdo a los documentos divulgados por el programa Periodismo para Todos, aparece en decenas de boletas de diferentes locales y comercios por montos altísimos y por servicios que nunca se habrían efectuados pero que sí se pagaron desde el Estado provincial.
Estas irregularidades fueron entre los años 2014 y 2015, época de la campaña presidencial en la que Daniel Scioli fue candidato. Pérez autorizó pagos extras por 17 millones de pesos, justificados por estas facturas, que ahora son investigadas por la Justicia.
La Distribuidora "Los Robledenses", de La Plata, se encarga de repartir por diferentes comercios pastas y empanadas. Una factura con su nombre figura en los documentos investigados. Aparecen $150.000 pagados por un servicio de catering, que nunca existió.
"Nunca le facturamos eso a nadie. A lo sumo puede haber boletas por $3.000 o 4 mil pesos. Tenemos la original que es a quien le vendimos", sostuvo uno de los dueños. Esa factura señala que fueron 121,90 pesos los que se cobró por 10 tapas de horno y 5 pascualinas. Ningún catering.
Con la Librería Pinocho, también de La Plata, pasó lo mismo. En la boleta que aparece en las rendiciones de cuenta de Carbone figura que se pagaron $90.000 por 18 banners impresos en vinilo para la Jefatura de Gabinete provincial. Nada de esto fue así.
La factura original, mostrada por su propio dueño a María Eugenia Duffard, evidencia un cobro el 21 de octubre de 2015 de 562 pesos por avisos del diario el Día de La Plata. "No soy proveedor de nadie. Acá se facturan cosas chiquitas. Todo mi negocio vale 90 mil pesos", comentó el dueño al mencionado programa.
En el caso de la zapatería "Glamour", de la localidad de Hudson, la cuestión fue algo más grave. El documento presentado por Carbone tiene un nombre apócrifo, Gráfica Tango, en lugar del original. El monto que figura del 13 de mayo de 2015 es de 150 mil pesos por folletería institucional para la jefatura de Gabinete. La boleta original y real es de 130 pesos por un pañuelo.
Lo mismo que ocurrió con "Glamour", le sucedió a la fábrica de sellos Periba S.A. Esa empresa aparece en una boleta presentada por Carbone como proveedor de pantallas gigantes y proyectores de sonido e iluminación para la Jefatura de Gabinete por un monto de 140 mil pesos. Pero la realidad es que en esa factura, con un código único e irrepetible para el fisco, aparecen cobrados en realidad 1730,50 pesos por la venta de sellos profesionales.
Lo que le pasó al autoservicio San Carlos está en la misma línea que lo de los demás locales. Este supermercado de barrio figura como beneficiario de dos servicios, uno por 70 mil pesos y otro por 50 mil, de un coffee break y refrigerio que se dio en una supuesta jornada de capacitación para el ministerio de Pérez. "Esto es un supermercado y no hacemos este servicio de barrio", comentó a PPT el encargado.
Otras irregularidades
Hay otra maniobra irregular que investiga la Justicia. Se trata de los fondos -cerca de 10 millones de pesos- que se dieron en subsidios a las cooperativas, a través de dos decretos del exgobernador Scioli, uno de diciembre de 2010, y otro de diciembre de 2009.
Periodismo para todos recorrió las Cooperativas El Ceibo, John William Cooke, Nuevo Mundo, y Prosperidad Marplatenese. Ninguna de las personas consultadas supo qué pasó con el dinero que tenía que llegarle a ellos.