AFIP estimó en u$s13.000 M el valor de la mercadería "encanutada" por el agro
Unos son los dólares que se van. Los otros, los dólares que deberían ingresar. Ambos guardan íntima relación con el actual momento económico, donde los argentinos que pueden tratan de viajar al exterior en plan de turismo y de compras, mientras que los sojeros -en definitiva los dueños de los dólares- encanutan los porotos a la espera de un mejor precio para liquidar.
En todo caso, ambos reflejan la misma realidad: el atraso cambiario.
La AFIP le puso números al fenómeno:
â—En los primeros nueve meses, los argentinos gastaron por la friolera de u$s4.183 millones con sus tarjetas de crédito en el extranjero. Pagaron pasajes, hoteles, excursiones, alquileres de vehículos y también las comidas y las compras en los shopping centers.
La utilización de los plásticos, en detrimento del efectivo, tiene una sola razón: la brecha entre el dólar "tarjeta" y el "dólar billete" fue entre 25% y 35% en los últimos meses.
Los consumidores, incluso, tienen la chance de reclamar la devolución del adelanto de Ganancias abonado con cada compra, con lo cual la brecha puede ampliarse al 70% entre usar la tarjeta y abonar en cash.
â—El otro dato divulgado por la AFIP refiere al stock de mercadería que los productos agropecuarios mantienen encanutados. En total, según la AFIP, existen productos por un valor de u$s13.000 millones pendientes de liquidación.
De acuerdo a los números ofrecidos por Ricardo Echegaray, titular de la AFIP, de ese global, u$s7.262 millones corresponde a la soja guardada en los silobolsas; otros u$s2.201 millones de trigo stockeado; y u$s3.531 millones de maíz.
La estimación oficial habla de un total de 41 millones de toneladas de granos retenidos en los campos, a la espera de novedades en el frente fiscal y cambiario.
Pareciera lógico que, mientras Daniel Scioli y Mauricio Macri, prometen una eliminación de las retenciones al trigo y al maíz, los productores aguarden ese momento para vender la mercadería.
Lo mismo vale para la soja: "Topo" Rodríguez, nominado para un eventual ministerio de Agricultura de Scioli, acaba de admitir que, en caso de ganar, habrá una baja de las retenciones al poroto "al menos al 30%", contra 35% del nivel actual.
A estos datos habría que sumarle otros dos para tener una mirada de 360 grados sobre la situación financiera y cambiaria: las ventas récord de dólar ahorro y la caída constante de las Reservas del Banco Central.
La conclusión parece obvia: la paridad actual entre el peso y el dólar -de $9,55- no es creíble para los agentes económicos. Por eso, todos aquellos que pueden le piden divisas al Banco Central (entiende que es barato); y quienes son dueños de la mercadería dolarizada prefieren acapararla hasta el momento de un mejor tipo de cambio. Al menos para ellos.