Ya pasó Halloween, pero en la primera semana de noviembre, la tónica en la campaña política de cara al balotaje es apelar al miedo.
Tras el batacazo opositor el pasado 25 de octubre, el Gobierno implementó una fuerte contraofensiva para incentivar el temor entre el electorado respecto a lo que pueda ocurrir si en la segunda vuelta gana Mauricio Macri.
La campaña del miedo se desarrolla en distintos niveles. En el plano político, tanto el candidato oficialista Daniel Scioli como distintos dirigentes kirchneristas tomaron la posta en la esfera pública para “alertar” sobre las “verdaderas intenciones” del aspirante de Cambiemos.
Uno de ellos fue el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, el gran perdedor en la provincia de Buenos Aires, que este lunes usó su habitual conferencia de prensa para arremeter contra sus oponentes en las urnas y, en especial, contra la gobernadora electa, María Eugenia Vidal.
Aníbal F. aseguró que tiene previsto "eliminar" el programa social educativo "Envión" y con ello "dar de baja a las 50.000 becas".
No sólo eso, aseguró que planea "despedir tanto maestros como alumnos".
"Hay compañeros nuestros que formaron parte de esa reunión, que la tienen filmada con sus teléfonos, y que oportunamente vamos a mostrar; se habló claramente de eliminar el programa y dar de baja a las 50.000 becas", aseguró.
Añadió que Cambiemos proyecta realizar "reducciones de fondos en lugares sensibles, que son despidos lisos y llanos". "Sin haber asumido, ya están sentenciando lugares", disparó.
La respuesta de Vidal no se hizo esperar: "Lo mejor sería que los candidatos discutan propuestas, que discutan de verdad la Argentina del futuro que le proponen al ciudadano, en lugar de elegir la agresión, la campaña sucia, algo que no se va a votar. No creo que la gente vote el miedo o la mentira. Ya nos conocen muy bien a todos, saben en qué gobiernos estuvimos, qué hemos hecho".
“No hay nada privatizado, no hubo ningún despido masivo de empleados públicos, no se privatizó ni se cerró ninguna escuela, ningún hospital, ningún servicio. Al contrario, en el balance hay más Estado. Eso es lo que cuenta", subrayó.
En ese sentido, reiteró que no tiene pensado cerrar ninguno de los planes sociales que actualmente existen en el territorio bonaerense, y dijo que "es una lástima que estén planteando la campaña de esta manera".
Miedo para todosLa embestida de Fernández es el segundo escalón de una estrategia expuesta este domingo en Fútbol para Todos.
En el entretiempo de Boca-Tigre, el partido con mayor audiencia de la fecha, se presentó un spot en el entretiempo en el que vincula al candidato presidencial de Cambiemos con José Alfredo Martínez de Hoz, el ministro de Economía de la última dictadura militar.
Más tarde, la Televisión Pública puso en aire el ciclo propagandístico 678, en el que abundaron las acusaciones contra Macri sobre un supuesto plan de ajuste.
En paralelo, se desplegó una fuerte campaña en las redes sociales, en las que con el hashtag #SiGanaMacri se alertó sobre las posibles "calamidades" que pueden ocurrir en el país con la llegada de un gobierno de derecha.
Como en tantas otras ocasiones, el dirigente piquetero Luis D´Elia fue el encargado de "hacer punta".
Publicó en su Twitter un video que asegura que tras un eventual triunfo del líder de Cambiemos, el país entrará en una debacle económica.
La respuesta de CambiemosEl primero en recoger el guante y denunciar una campaña sucia en su contra fue el propio Macri, que ayer enfatizó que "el oficialismo despliega ahora una estrategia oscura de llenar de pesadumbre y de miedo a la población, con el único objetivo de asustarlos ante la posibilidad de cambiar".
En tanto, el lider del radicalismo en Santa Fe, Mario Barletta, afirmó que "sería mucho mejor que la campaña se concentre en las propuestas, en las políticas, los nombres, las medidas concretas que piensan tomar uno u otro en caso de llegar al gobierno y terminar con la confrontación característica de este Gobierno".
"Estamos convencidos que Macri es lo mejor, no sólo para la Provincia sino para el país", sostuvo el diputado radical.
El FpV se defiendePese al ruido que generaron las consignas "anti Cambiemos", dirigentes oficialistas negaron una supuesta "campaña sucia" en contra del candidato presidencial, aunque insistieron en señalar que "propone el camino del ajuste".
"¿Decir la verdad es meter miedo?", planteó Aníbal Fernández.
Y añadió: "Vean la explicación de Martínez de Hoz, y la explicación de sus economistas (por Macri), y son exactamente iguales".
En declaraciones a la prensa en la Casa Rosada, Fernández indicó: "Canal 13, la productora de Lanata, Martín Lanatta, Carrió, Leuco, y todo su grupo me denunciaron a mí por tráfico de una droga y por haber matado a tres personas, y ¿resulta que ahora Macri se asusta porque le dicen cosas que son reales?", comparó.
"Cuando hablan de la esperanza intacta y todas esas estupideces es porque no quieren decir lo que van a hacer con la economía. Las políticas económicas que quieren llevar a la práctica son antipopulares ciento por ciento", advirtió el funcionario.
Scioli, en tanto, eligió una nueva estrategia para denostar a su oponente: llamar a Macri, "el candidato de la Alianza", en clara alusión al fallido gobierno de Fernando De la Rúa y Carlos "Chacho" Álvarez.
Para Scioli, esta reversión de 2015 de aquella coalición de partidos que triunfó en las urnas en 1999, "propone el camino del ajuste".
Sin embargo, luego trató de quitarle cualquier tono agresivo a su mensaje: "No se trata de una cuestión de miedo, todo lo contrario. Vayamos al cambio seguro, vayamos a lo posible, a lo real, yo garantizo eso".
¿Funcionará la estrategia del FpV?
En medio de esta dura pulseada, con dardos que se lanzan desde todos los frentes, desde Cambiemos descartaron que la estrategia del FpV pueda llegar a influir en las urnas.
"Faltan tres semanas, mucho daño no van a poder hacer", sintetizó el diputado nacional por el PRO, Federico Pinedo.
En este contexto, el sociólogo Marcos Novaro afirmó que el plan de canalizar votos apelando al temor "a veces funciona y a veces no. Pero en este caso,"‹"‹ la gente ya apagó el registro de las acusaciones hacia Macri, porque desde 2011 en adelante el kirchnerismo tuvo una estrategia de puro miedo”.
El experto fue claro al afirmar que si bien el kirchnerismo consolidará más votos, la campaña de miedo contra Cambiemos no alcanzará para revertir lo que están marcando los sondeos, que dan como ganador a Macri en el balotaje.
En tanto, desde la consultora Polldata también desacreditaron la efectividad de las campañas sucias: “Históricamente no han tenido impacto o incluso han sido contraproducentes".
En un sondeo realizado por dicha consultora detectaron que cais el 60% de los encuestados no considera creíbles las acusaciones hacia Macri.
Según los analistas, es una cifra similar a la proporción de gente que -de acuerdo con los resultados- “busca un cambio”. En buen romance: la campaña de infundir temor no está penetrando en la postura del voto opositor.
"La sociedad demostró que está más propensa a respuestas proactivas antes que reactivas", explica Graciela Römer, quien considera que, a nivel general, "no sirve para torcer el resultado de una elección".
Enrique Zuleta Puceiro coincide: "Son inútiles, nunca prosperaron".
Así, el hashtag #SiGanaMacri dejó de ser un espacio de la "campaña del miedo" que desplegó en los últimos dias el kirchnerismo se convirtió en un recurso para el humor, tal como se puede ver en esta nota.
¿De dónde viene el temor?
Como una suerte de contraofensiva, el diputado del PRO, Federico Pinedo advirtió que "los que tienen miedo en realidad son ellos", en referencia a los dirigentes del FpV.
Así, el legislador hizo referencia a las internas que se vienen desatando en el seno del kirchnerismo, que están dejando en evidencia el pase de facturas y el mal clima que se respira en el oficialismo.
Otra fuerte reacción provino del diputado nacional del Frente para la Victoria y apoderado del PJ, Jorge Landau, quien señaló que las últimas declaraciones de Randazzo habían sido de "una inoportunidad absoluta".
Además, dijo que el funcionario nacional privilegió "las posiciones personales por sobre el interés del conjunto".
"Todos tienen derecho a decir lo que piensan, a sostener las ideas que quieran tener. Lo único que uno, en el mundo de la política, tiene que saber que hay tiempos para cada cosa. Y éste no me parece el tiempo adecuado", fustigó.
A modo de conclusión, afirmó que "eso a lo único que ha ayudado es a pensar que nosotros vamos a ser un desorden permanente si llegamos al Gobierno".
En definitiva, dejó en claro que en el kirchnerismo hay una "campaña del miedo" pero que está operando dentro del propio espacio oficialista.