El Gobierno pagará u$s500 millones para cerrar cinco demandas en el CIADI
El Gobierno pagará a cinco empresas unos u$s500 millones con el objetivo de que levanten las demandas contra el país ante el CIADI (tribunal del Banco Mundial) y el Uncitral (la corte que depende de las Naciones Unidas), trascendió este jueves en los mercados, lo que hacía subir casi 5 por ciento la Bolsa porteña.
El gobierno aplicará una quita y el desembolso se realizará en bonos soberanos Bonar 2017 y el Boden 2015, lo cual sería anunciado este jueves en el marco de una videoconferencia que realizaría el vice a cargo de la presidencia Amado Boudou, con el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, desde Washignton, si se pueden solucionar problemas con el satélite.
Las compañías a las que se les pagará son Azurix, Blue Ridge, Vivendi, National Grid y Continental Casualty Company, según anticipó NA.
Lorenzino está en Washington participando de la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI), que se realiza en conjunto con el Banco Mundial.
Varias empresas demandaron a la Argentina ante el Centro Internacional de Arreglos de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) por supuestos incumplimiento contractuales, causados por medidas que incluyeron el congelamiento de las tarifas de compañías de servicios públicos y su conversión de dólares a pesos en medio de una fuerte devaluación.
El país sudamericano también está inmerso en una larga y multimillonaria batalla judicial con tenedores de deuda en cesación de pagos que se negaron a aceptar quitas a cambio de bonos que el país honra regularmente.
Azurix, que prestaba servicios de agua potable, y Blue Ridge, que heredó la demanda cuando compró la participación de CMS Gas Transmission Company en una transportadora de gas natural en Argentina, obtuvieron sentencias favorables en el CIADI por más de 300 millones de dólares en conjunto.
Hasta ahora, Argentina se negó a compensar a las empresas que obtuvieron fallos favorables en el CIADI con el argumento de que debían litigar en tribunales locales, lo que llevó a Washington el año pasado a cancelar una serie de beneficios comerciales al país.
Como parte de la campaña de presión, Estados Unidos también votó en contra del otorgamiento de nuevos préstamos a Argentina en el directorio del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo.