¿Cuál es el mejor aeropuerto del mundo?
Durante unas recientes vacaciones, Andrew Tregonning y su esposa Gill, se relajaban en un jacuzzi en la terraza. Tenían a su disposición un sinnúmero de restaurantes y comercios, muchos con mercadería exenta de impuestos, un recorrido turístico en autobús, una sala de cine y hasta un jardín tropical de mariposas.
Podría sonar como que se encontraban en un hotel de lujo en una populosa ciudad. Pero la realidad es que estaban ni más ni menos que en el aeropuerto.
Los Tregonning viajaban de Nueva Zelanda a India y optaron por una prolongada estancia en el Aeropuerto Internacional de Changi, de Singapur, tan sólo para entretenerse.
"Era la primera vez que hacíamos algo así", confiesa Gill y agrega: "Fue maravilloso".
Changi es probablemente uno de los aeropuertos más fabulosos del mundo. Desde su inauguración, en 1981, ha conseguido más de 370 reconocimientos internacionales como el "mejor" por parte de grupos y publicaciones turísticas.
Un vistazo a sus operaciones revela mucho acerca de cómo dirigir un aeropuerto de primera categoría arroja lecciones sobre lo que otros aeropuertos pueden hacer para mejorar sus servicios.
Changi ofrece amenidades que tan sólo se encuentran en las salas de lujo de aerolíneas para pasajeros VIP. Hay zonas cómodas para dormir o ver televisión, bares de primer nivel, escritorios de trabajo y conexión gratuita a Internet.
El lugar donde uno puede tomarse siesta cuesta aproximadamente u$s23 por tres horas, mientras que una ducha ronda los u$s6 la hora. En tanto, si desea poner sus pies en un estanque con pececitos que comen piel muerta, la actividad cuesta u$s17 por 20 minutos.
La piscina es gratuita para los huéspedes de los hoteles en tránsito del aeropuerto; de lo contrario hay que desembolsar otros u$s11 por persona.
Además, Changi ofrece un paseo gratis en micro por Singapur. Los pasajeros no tienen que pasar por el control migratorio y el aeropuerto retiene los pasaportes, por si a alguno se le ocurre escapar.
Las cosas simples importan, como minimizar los irritantes anuncios o bocinas de carritos de transporte. En cambio, el aeropuerto transmite música suave para reducir el estrés.
Otro detalle: las pantallas táctiles en los baños permiten enviar mensajes de texto a los supervisores cuando se acaba el papel higiénico, por ejemplo.
Changi cree que esos beneficios tientan a los pasajeros a gastar más dinero en el aeropuerto y elegir Singapur en vez de otros puntos de conexión.
Unos 70.000 metros cuadrados de espacio para concesiones proveen cerca del 50% del ingreso del aeropuerto, contribuyendo a financiar los servicios y limitar los gastos de las aerolíneas, aseguró una nota del Wall Street Journal.
Además, según puntualizó el propio aeropuerto, sus comercios registraron u$s1.000 millones en ventas el año pasado.
Espacio de diversión para los que compran
Los beneficios antes mencionados son muchos, pero no son todos los que ofrece Changi. De hecho, la diversión también tiene un espacio importante en el aeropuerto.
Un tobogán entubado de cuatro pisos, como el del mejor parque de diversiones, también forma parte del paquete de comercio minorista.
Para usarlo, hay que mostrar un recibo de un comercio del aeropuerto por u$s8 o más en compras. Sin ese recibo, tan sólo se puede usar el piso y medio inferior del tobogán.
Una verdadera ciudadLa Terminal 3, la mayor del aeropuerto, se inauguró en 2008 con tragaluces, una pared de ventanales y una pared interior cubierta con plantas que rotan desde el invernadero.
Es una ciudad con tintorerías, un centro médico que comprende desde atención dental hasta tratamientos de fertilidad, tiendas de alimentos, farmacia, florería, joyerías, comercios de ropa y un parque de diversiones cubierto para niños, con un castillo inflable.
Changi, el aeropuerto número 18 del mundo por tráfico de pasajeros, es más chico que el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy de Nueva York y el de Schiphol, de Ámsterdam, pero mayor que el de Shanghai y el Bush Intercontinental de Houston, y es un excelente punto de conexión para vuelos entre el norte y el sur de Asia así como Europa y Oceanía.
No tan sólo es un centro para Singapore Airlines, sino también un punto de recarga de combustible para aerolíneas europeas y australianas. Por ello, ofrece muchas actividades para viajeros con tiempo a su disposición.
"Queríamos transformar la manera de viajar y crear una experiencia sin estrés", explicó Foo Sek Min, vicepresidente ejecutivo de Changi Airport Group, operador del aeropuerto.
La firma se convirtió en compañía estatal en 2009 y ha tenido abundante apoyo del gobierno, que considera al aeropuerto un elemento clave de desarrollo económico para la nación isleña de rápido crecimiento.
Jardín de mariposas
El proyecto personal de Foo fue el jardín de mariposas. Tranquilizador y relajante, es un jardín tropical de dos pisos frente a las puertas de embarque de los superjumbos A380 de Singapore Airlines.
Como fumar no está permitido en el interior del aeropuerto, el concepto original era un jardín de fumadores. "¿Por qué no hacer más?", se preguntó.
Clientes VIP
Changi también tiene una terminal privada usada por celebridades, personalidades del jet-set, altos funcionarios gubernamentales, empresarios y cualquier persona dispuesta a pagar.
Por u$s1.150, uno recibe transporte en limosina desde y hacia el avión. Por u$s231, se puede usar la terminal privada y viajes en carritos de golf a las puertas de embarque. Por u$s62, el personal del aeropuerto saluda al pasajero a su arribo y lo escolta por las principales zonas de la terminal.
El servicio al cliente es visible. Hay kioscos desperdigados por el aeropuerto en los cuales los pasajeros pueden comunicar sus impresiones. En los baños, aparentemente siempre limpios y decorados con florcitas, pantallas táctiles junto a los lavabos piden a los clientes que le pongan nota a las instalaciones.
El ejecutivo minero Kevin Swendson, que se encaminaba a su hogar en Indonesia tras un viaje de trabajo a Singapur, fue a uno de los cines del aeropuerto a ver Rápido y Furioso 5. El teatro tiene sonido de audio envolvente y anchos pasillos para maniobrar con el equipaje.
"Muchos aeropuertos son infernalmente aburridos. Pero aquí hay cine, masajes, comida, es fabuloso", opinó. Su consejo para otros aeropuertos es que, "tengan un poco de imaginación y agreguen algo de condimento. No parece tan difícil".