Vidas conectadas: cómo van a interactuar los dispositivos del hogar en el futuro
Los pisos de la casa llamarán a los servicios de emergencia si el dueño del hogar tuvo un desmayo. La cocina y la heladera recolectarán los datos provenientes de los ejercicios en la bicicleta fija para establecer la dieta adecuada y ordenar el pedido al supermercado.
Una muestra anticipada de este entorno de "vidas conectadas", que comenzará a ser realidad en los próximos años, se observó en la CeBIT, la mayor exposición tecnológica mundial, por superficie ocupada (unos 41 mil metros cuadrados), empresas expositoras (casi 4.200) provenientes de 68 países y asistentes (unos 400 mil), que se realizó entre el 2 y el 6 de marzo en la ciudad alemana de Hannover.
El eje principal de la edición 2010 de esta exposición fue la creación de un mundo donde personas, computadoras y otros equipos con los que se interactúa en forma cotidiana, desde automóviles hasta lavarropas, estarán conectados en forma permanente entre sí.
Este entorno de "vidas conectadas" puede ahorrar dinero y tiempo y hacer la vida más sana y segura, así como más cómoda y sostenible. Se busca que el usuario pueda gestionar todos los dispositivos del hogar y servicios por sí mismo, sin necesidad de ningún administrador de sistemas o de disponer de los conocimientos técnicos necesarios.
Sin embargo, para hacer que el hogar esté todo conectado, los aparatos deben hablar el mismo idioma. Por ello, la red de socios del consorcio "Vida conectada" utiliza un estándar uniforme para las redes domésticas.
La necesidad de ahorrar energía y de utilizar con mayor eficiencia los gastos dedicados a cuidar una creciente cifra de personas ancianas son los principales impulsores de estas aplicaciones, servicios y dispositivos que están en la etapa previa a su lanzamiento al mercado.
Otra causa que favorece su llegada es el aumento de la cantidad de trabajadores móviles, que deben reportar desde la calle a sus oficinas centrales pero además necesitan estar conectados con sus parientes o con su hogar.
Al recorrer los 20 pabellones de la CeBIT los visitantes se encontraron con diferentes situaciones de "vidas conectadas". Entre los salones 8 y 9 se reunieron los desarrollos más llamativos, entre ellos una demostración de hogar hipervinculado.
¿Es posible conectar la cocina, el comedor y la sala de "fitness" de una manera práctica? La respuesta a esta pregunta se hallaba en la "casa conectada", cuyas demostraciones iban mucho más allá de los ya existentes sistemas de energías que pueden ayudar a usar la calefacción y la iluminación eficiente.
En el lugar se mostró cómo las computadoras pueden ser utilizadas para influir en los procesos cotidianos, tales como la recolección de datos en la sala de "fitness", necesarios para proporcionar la base para el desarrollo de un programa de entrenamiento y nutrición.
El "asistente" del chef supervisaba si los alimentos seleccionados están en la heladera y proporcionaba una lista de las compras necesarias en la pantalla digital de la misma cuando las existencias comienzan a agotarse. Está previsto que este asistente digital ordene por Internet la adquisición en el supermercado de los alimentos cuando queden pocas unidades.
Mientras tanto, se puede pasar la lista de compras a un dispositivo portátil (teléfono inteligente, o agenda digital o Palm) para llevarla al supermercado. En la cocina de esta casa, los visitantes podían ver cómo los diferentes aparatos domésticos funcionaban en una computadora central.
Cuando se cocina, se puede hacer un seguimiento de la marcha de la cocción en la hornalla, el horno y el microondas desde el televisor del living. En la pantalla aparecía un alerta cuando algunos de esos procesos se completaban. También se informaba sobre la evolución del lavado de ropa y la calefacción o ventilación de los ambientes de la casa.
Esta casa modelo del futuro se extendió en unos 400 metros cuadrados. La energía utilizada para la calefacción y la iluminación eran administradas por un programa informático, cuyo objeto era el de generar ahorros.Piso inteligenteLa empresa Shape exhibió en esta casa un piso hogareño, a través del cual se podían encender las luces o llamar a los servicios de emergencia en caso de un accidente. Compuesto por un tejido integrado con microelectrónica y sensores de proximidad, este desarrollo, llamado SensFloor, genera señales a una unidad central de control que las analiza para crear un perfil de actividad de la persona, y ayuda a prevenir posibles accidentes y convoca a parientes o médicos en caso de un problema.
Por ejemplo, se pueden reconocer las caídas y llamar a los servicios de emergencia si la persona no se levanta de nuevo dentro de un plazo determinado. El piso también puede utilizarse para encender la luz, cuando una persona ingresa a la habitación o sale de la cama.Oportunidad de negociosEl desarrollo de este hogar conectado fue responsabilidad de un consorcio de empresas y universidades en un mismo espacio común, el Centro de Innovación "Vidas Conectadas". El reflejo de esta iniciativa estuvo en las cuatro habitaciones con muebles, dispositivos y servicios.
La meta es concreta: ayudar al usuario a vivir más cómodo y en un ambiente más eficiente, con una baja de los costos de mantenimiento y un aumento en la salubridad.
Detrás de este desarrollo hay redes de comunicación entre todos los aparatos eléctricos y su integración con la asistencia digital avanzada. Los propios residentes pueden hacer la integración individual de estos componentes y gestionar la red de origen, sin necesidad de conocimientos técnicos.
La conexión a Internet permite, por ejemplo, que el aburrido ejercicio de bicicleta fija sea más dinámico. En la casa la bicicleta estaba frente a una pared donde se proyectaban mapas y videos de recorridos urbanos y rurales y de montañas. Por ejemplo, calles de Nueva York o de Berlín a través de la aplicación de imágenes satelitales Google Earth, con trayectos acordes a las necesidades de entrenamiento del usuario, e información del tráfico en tiempo real.
Los habitantes de la casa también podrán monitorearla a distancia. Se hizo una demostración en la cual desde un teléfono móvil se podía establecer la hora de inicio del programa de lavado de ropa, o regular la temperatura del horno, o reconocer si por error o accidente se dejó abierta la puerta de la heladera. Por supuesto, también se pueden apagar o encender las luces a través de Internet.
De la misma manera, se podrá administrar a distancia lo que está viendo algún niño en el televisor o en su computadora.
Una aplicación que permitía otra experiencia de inmersión en la casa mostrada en la CeBIT era un escritorio multimedia, al estilo del Surface de Microsoft (ver foto arriba).
Esta mesa multitoque moderna tiene como objetivo que los usuarios puedan buscar los dispositivos que se combinan entre sí. Las capacidades de los servicios y dispositivos se describen por separado y están encapsuladas por el hardware. Esto permite que si hay equipos que no se pueden integrar entre ellos, la red igual permanece intacta.
Si se utiliza un marco de fotos digitales, el usuario ve cómo un juego de consola lo detecta automáticamente como un dispositivo de salida en la red doméstica. ¿Los hijos están conectados y están jugando en la Wii o la PlayStation? En ese marco se podrán reflejar los resultados de esa actividad lúdica. También información actualizada acerca de la casa, como la temperatura ambiente o la calefacción se leerán en la pantalla del marco.
La automatización de la calefacción, ventilación y la administración de electrodomésticos pueden ser optimizados con estos sistemas. Según el consorcio de "vidas conectadas", el ahorro puede llegar hasta un 30 por ciento.
El Centro de Innovación fue fundado a mediados del 2009 por iniciativa de la Universidad Técnica de Berlín, y actualmente tiene 25 miembros.
La red de socios de las empresas y las instituciones académicas tiene el objetivo de crear una norma uniforme para estas redes domésticas.
Participan compañías fabricantes de equipos de electrónica de consumo, tecnología de la información, telecomunicaciones, de electrodomésticos y del ámbito de la comunicación.
César DergarabedianEnviado especial a Hannover, Alemania
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