Buenos Aires ya es la segunda ciudad más cara de América latina

Si no fuera por el alto nivel de precios que tiene la capital de Panamá, Buenos Aires sería la ciudad con el costo de vida más caro de América latina. Pero, a pesar de no haber alcanzado el primer puesto, hoy la capital argentina ocupa el segundo lugar en el ranking de ciudades con el mayor costo de vida del mundo que elabora el banco suizo UBS.

En este informe, la Capital Federal se encareció 10 puestos con respecto al último ranking del 2015, cuando a nivel mundial ocupaba el lugar 55 y ahora pasó a estar en el puesto 65. De hecho, en la región supera a Santiago de Chile, y a ciudades brasileñas como San Pablo y Río de Janeiro, además de Montevideo.

El documento de la entidad bancaria europea toma en cuenta precios y salarios y se actualiza cada tres años desde 1970. Los datos sirven para comparar el costo de vida en 71 ciudades del mundo utilizando de manera comparativa una canasta de 29 productos básicos, entre los que figuran el pan, el arroz, la leche, la carne, el pescado, los vegetales y las bebidas. Pero también otros artículos como el valor de un iPhone, de un café, un auto, una computadora, Netflix, un Big Mac, una computadora, un jean, zapatillas, el aquiler de una vivienda, la compra de un auto y hasta de una cerveza.

En la mayoría de estos rubros, Buenos Aires solamente es superada por Ciudad de Panamá en la región,  al tenerse en cuenta, por ejemplo, que el celular de Apple localmente tiene un valor de u$s2242. O de una PC portátil, que llega a los u$s1310, mientras que un café ronda los u$s1,9; un Big Mac, los u$s4, un par de jeans llega a u$s44 y unas zapatillas, hasta u$s83.

De hecho, se trata de precios no solamente más caros que otras ciudades latinoamericanas sino también en comparación con los de otras economías europeas, algunas desarrolladas como Francia y Reino Unido, Suiza, Canadá , Estados Unidos y hasta asíaticas como la de Hong Kong, donde un iPhone se consigue por u$s1000 o una computadora portátil por u$s560. Hasta se puede comer un Big Mac por u$s2,8 o comprar un par de jeans por u$s54.

Pero además, en algunos casos, hay que trabajar más que en otras ciudades para poder alcanzar la compra de alguno de estos productos. Por ejemplo, en Buenos Aires se deben trabajar 53 minutos para adquirir un Big Mac, contra los 15 minutos de Nueva York. En el caso de un iPhone, se llega a los 470 minutos contra los 54 minutos de la ciudad norteamericana. Lo mismo que para un corte de pelo ya que en Buenos Aires se necesitan 258 minutos de trabajo contra los 128 m inutos de Nueva York.

Las cifras surgen de la encuesta hecha por UBS entre enero y abril pasados, justo antes de la devaluación del peso frente al dólar que llevó la moneda norteamericana de $20 a los actuales $25 y que, de hecho, incrementó aún más los precios de casi todos los productos, incluyendo los evaluados por el informe del banco suizo. La encuesta fue realizada localmente por observadores independientes entre sí y compara los datos en línea recopilados de más de 75.000 puntos de datos, incluyendo los salarios brutos promedio de cada ciudad.

El resultado de este estudio muestra que detrás de Buenos Aires se ubica Santiago de Chile, en el tercer lugar regional y en el puesto 48 a nivel global, por delante de otras ciudades de la región como San Pablo, Río de Janeiro, Lima, Bogotá y Ciudad de México.  Las razones por las cuales la entidad bancaria europea lleva a cabo la encuesta se encuenran en la necesidad de ofrecer a inversores y turistas datos sobre el poder adquisitivo de las principales ciudades del mundo.

A nivel global, el informe de UBS concluyó que Zúrich es la ciudad más cara del mundo, seguida por Génova, Oslo, Copenhague, Nueva York, Tokio, Milán, Londres, Chicago y Helsinki. Las más baratas son Nueva Dehli, Manila, Kiev, Lagos y El Cairo.

La entidad bancaria indicó que el costo de vida es relativo y puso como ejemplo el precio de un corte de pelo, que vale u$s94,32 en Zúrich y u$s12,17 en Ciudad de México. "No obstante, mientras que una mujer en Zúrich generalmente debe trabajar solo 3,05 horas para permitirse este servicio, el mismo gasto requiere 5,86 horas en Ciudad de México", precisó el trabajo.