Ahora los "gordos" analizan convocar a un congreso de la CGT
Ningún dirigente de la CGT quiere ser quien termine de fracturar la central obrera, pero todos hablan abiertamente de ruptura.
El miembro del triunvirato de las CGT y referente de los "gordos", Héctor Daer, ratificó que su sector y los independientes no marcharán el 21 de febrero junto al moyanismo contra el gobierno de Mauricio Macri y avisó que podría convocar "a un Congreso de la CGT en algún momento" si es que no se puede mantener la unidad con el moyanismo.
Daer rechazó la protesta organizada por Hugo Moyano y respaldada por el gastronómico Luis Barrionuevo, las dos CTA, movimientos sociales y hasta un sector del PJ.
La movilización "es por una agenda determinada" del sindicato de Camioneros y exhortó a "mantener la institucionalidad y la unidad" de la central obrera.
Daer encabezó el miércoles en la sede de su gremio (Sanidad) una reunión con 14 sindicatos que integran el consejo directivo de la central entre los que estaban Armando Cavallieri (Comercio), Gerardo Martínez (UOCRA), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Carlos Quintana (UPCN), Omar Maturano (La Fraternidad) y Noe Ruiz (Asociación de Modelos Argentinas).
La respuesta del camionero no tardó en llegar.
Horas más tarde, Moyano advirtió que "si hay un sector dispuesto a pelear" contra las políticas laborales del Gobierno "lo va a seguir haciendo dentro o fuera de la CGT", a la vez que dijo no creer que haya una persecución en su contra.
Moyano cargó por la noche contra "los Gordos" de la CGT que hoy resolvieron no adherir a la movilización del próximo 21 de febrero y señaló que siempre son "oficialistas", cualquiera sea el gobierno.
"Siempre fueron iguales", aseguró.
En ese marco, el dirigente admitió que "por supuesto que iría" a una hipotética "mesa de diálogo" convocada por el presidente Mauricio Macri, y ratificó que se sentaría a tomar un café con la expresidente Cristina Kirchner: "Si paga ella".
Justificó ese encuentro con la ex mandataria, a quien se opuso durante su segundo mandato, "si la situación merece y necesita" para oponerse a las leyes "que han perjudicado enormemente a los trabajadores".
En declaraciones al canal de noticias TN, Moyano aseguró que "antes de hacer algo que perjudique a los trabajadores, prefiero que me metan en cana o me maten", a la vez que dijo que la convocatoria a la marcha es amplia, ya que no se puede discriminar.
Respecto de las acusaciones en su contra, por parte del ministro de Trabajo Jorge Triaca las consideró "lamentables" y le aconsejó al funcionario "que se busqué mejores servicios" de información, al negar haber difundido el entredicho con su ex empleada, a quien habría mantenido en negro y designado con un cargo en el SOMU.