Más competencia para Arsat: autorizan otros dos satélites extranjeros a operar en el país
El Ministerio de Comunicaciones autorizó a la francesa Eutelsat a operar con los satélites Eutelsat 115 WA y Eutelsat 117 WA.
Estos permisos se suman a los que el gobierno otorgó recientemente a Eutelsat 113 WA y al satélite holandés NSS-806, el cual fue habilitado a migrar de la posición orbital 40,5 a la 47.5 Oeste.
Además, recientemente también se le dio luz verde a DirecTV para comercializar banda ancha directa al hogar en banda Ka con Spaceway 2.
Con esos satélites, las compañías extranjeras apuntan a los mercados de datos, video y movilidad.
Todo este combo de autorizaciones son consecuencia de una fuerte presión que se ejerce desde el sector privado e incluso desde adentro del propio gobierno para avanzar hacia una política de cielos abiertos satelitales, que pondría en jaque a la estatal Arsat y a gran parte de la industria área espacial que se desarrollo en torno de la empresa.
A partir de los compromisos asumidos por la administración Menem en la Organización Mundial del Comercio, ratificados por las leyes 24.495 de diciembre de 1994 y 25.000 de julio de 1998, la Argentina liberalizó sus servicios de telecomunicaciones en noviembre de 2000.
La única excepción fue la provisión de facilidades satelitales ya que en febrero de 1993 el gobierno le había adjudicado a un consorcio extranjero un contrato para la provisión, puesta en servicio y operación del sistema satelital nacional y en el contrato se aclaró expresamente que el Estado argentino no autorizaría a terceros prestadores de satélites extranjeros si no existía un convenio de reciprocidad de tratamiento por parte del Estado al que pertenecía dicho prestador.
La liberalización se produjo en parte porque el gobierno incorporó las condiciones para la firma de acuerdos de reciprocidad en el Reglamento de Gestión y Servicios Satelitales y luego cerró convenios con Estados Unidos, Canadá, México, España, Brasil y Holanda.
De ese modo, el andamiaje jurídico quedó armado en la década del 90 para facilitar el desembarco de los satélites extranjeros, aunque cada vez que un operador extranjero quiere ingresar en el país necesita que el regulador le autorice los derechos de aterrizaje.
Tanto los Eutelsat 115 WA (ex Satmex 7) y Eutelsat 117 WA (ex Satmex 8) autorizados ayer, como el Eutelsat 113 WA (ex Satmex 6) habilitado el viernes 19 de agosto son satélites mayorista que operan en las bandas C y Ku, las mismas en las que brinda servicio el Arsat 2, el cual todavía no tiene vendida toda su capacidad en ambas bandas.
Aunque esa capacidad terminase de ser vendida, la ley 27.208 de Desarrollo de la Industria Satelital aprobada en noviembre del año pasado contempla la construcción de nuevos satélites argentinos, situación que se complica si la competencia extranjera se incrementa, advirtió el diario porteño Página/12.
Otra polémica es que Satmex era una empresa mexicana, pero en enero de 2014 pasó a ser controlada íntegramente por la francesa Eutelsat, país con el que no hay convenio de reciprocidad satelital vigente.
En enero el ministro de Comunicación, Oscar Aguad, y el embajador francés Jean-Michel Casa ratificaron la decisión de reforzar y ampliar los vínculos de cooperación entre la Argentina y Francia en materia satelital, lo cual se reforzó el mes siguiente cuando el presidente francés François Hollande visitó Buenos Aires.