Escándalo: cientos de líderes religiosos, registrados en el sitio de infieles Ashley Madison
Entre los usuarios del escandaloso sitio de infieles Ashley Madison, estarían registrados unos 400 líderes religiosos en EE.UU. y Canadá que pronto presentarán su dimisión, según las estimaciones del autor, investigador y pastor Ed Stetzer en el blog Christianity Today.
"Es un momento muy vergonzoso para la Iglesia y debería serlo", ha escrito Stetzer en su artículo titulado 'Mi pastor está en la lista de Ashley Madison', y que consigna el portal RT.
En julio pasado, el grupo de 'hackers' Impact Team afirmó que había robado los datos personales del sitio que promueve la infidelidad y amenazó con publicarlos a menos que el portal fuera cerrado.
Los 9,7 gigabytes de información fueron publicados en agosto generando un escándalo.El CEO de Ashley, afueraA los conflictos generados por la violación hacia la privacidad de 37 millones de usuarios del sitio web, a Ashley Madison se le había sumado otro más: su fundador, renunció con carácter inmediato.
Avid Life Media informó a través de un comunicado que la decisión de Noel Biderman "va en el mejor interés de la compañía", dirigida hasta encontrar un reemplazante por el actual equipo gestor.
Asimismo, la empresa dijo que está en un proceso de adaptación con respecto a la violación de la privacidad de los usuarios del sitio al tiempo que remarcó que "coopera activamente" con los directivos internacionales.
Esto, señaló, "en un esfuerzo para llevar ante la justicia a los responsables del robo de información de los miembros y la empresa".
La renuncia se produce tras el ciberataque sufrido por la compañía en la que miles de usuarios fueron perjudicados después de ser hackeados por un grupo de piratas informáticos denominados «The Impact Team», que reveló la información personal y financiera de 37 millones de clientes.
La polémica desatada por el robo y divulgación de los datos de esta red social para organizar citas entre personas casadas podría generar acciones disciplinarias contra funcionarios o militares que han coqueteado en horas de trabajo.
Según se estima, hasta 15.000 direcciones de correo electrónico podrían ser de dominios del Gobierno o las Fuerzas Armadas estadounidenses.