Paritaria inédita: gracias a subsidios, la UTA tendrá un aumento salarial del 40% en 18 meses
La Unión Tranviarios Automotor (UTA), el gremio de colectiveros liderado por Roberto Fernández, y las cámaras de transporte lograron cerrar una paritaria inédita que no solo perfora el "techo" impuesto por la Casa Rosada con un aumento del 40% en 18 meses, sino que también, parte de ese incremento deberá ser pagado por el próximo gobierno a través de subsidios.
El acuerdo, alcanzado el martes establece que los sueldos de los colectiveros subirán un 27,8%, con retroactividad al 1° de junio y hasta fin de año. Además, por el mismo plazo se les pagará un adicional no remunerativo de $2.125 como compensación por la falta de acuerdo salarial en estos primeros seis meses de 2015.
En tanto que de enero a junio próximo, el próximo Gobierno desembolsará un 10,6% acumulativo respecto de la primera cuota, informó el diario Ambito Financiero. Es decir que el 38,4% nominal de ambos pagos representará un 40% de bolsillo, de acuerdo con los cálculos de los funcionarios.
De esta manera, el Estado desembolsará más de 7.000 millones de pesos en subsidios para resolver la negociación salarial de los colectiveros hasta mediados del año que viene, lo que implicará que parte del aumento lo pagará la próxima administración.
Los subsidios entre enero y diciembre de este año totalizarán $4.500 millones. Con el aumento previsto para 2016, el pago extra en subsidios debería ser de al menos $2.500 millones para el primer semestre. El aumento alcanzará a 54.000 choferes de colectivos de la zona metropolitana y el Gran Buenos Aires, y a otros 34.000 del resto del país.
Con el aumento de junio el sueldo básico conformado de la actividad subirá de los actuales $11.495 a $14.690. Y a $16.247 desde enero próximo.
El Gobierno espera que con este nuevo convenio el sindicato levante todas sus tentativas de paro que empañarían la campaña electoral. Es que el gremio de Fernández fue el protagonista de los últimos paros nacionales, del 31 de marzo y el 9 de junio, y amagaba con incorporarse a nuevas medidas de fuerza por parte de los sindicatos del transporte que no le reportan al Ejecutivo.
De todos modos, para aventar cualquier conflicto Transporte deberá abocarse hoy a la negociación de los choferes de media y larga distancia.
En este caso también exigirá una ingeniería particular, porque si bien no hay subsidios en el sector, el Gobierno aceptó el año pasado pagar multimillonarias compensaciones a los empresarios a cambio de que no efectuaran despidos de choferes.
Sobre este punto la orden de la semana pasada a los funcionarios de negociar sin ofrecer pago alguno a los empresarios cambió desde el lunes: el Estado les dará a los dueños de micros de larga distancia al menos las mismas compensaciones que pagó hasta ahora. En la UTA ya habían advertido que la negociación de larga distancia sería la más problemática.