La Provincia citó a trabajadores y directivos de Donnelley y busca resolver el conflicto
El Ministerio de Trabajo bonaerense convocó para este lunes a la tarde a una audiencia de conciliación a directivos de la empresa gráfica Donnelley y a trabajadores, luego de que se comunicara el cierre definitivo de la planta ubicada en la localidad de Garín.
El encuentro está pautado para las 16 "con el objetivo de proteger el empleo" de las 400 personas que trabajan en la fábrica, según se informó en un comunicado de prensa.
Los empleados cortaban esta mañana el tránsito de la colectora de la autopista Panamericana, frente a la planta de la empresa gráfica que publica varias de las principales revistas del mercado.
Es que cuando los trabajadores de la imprenta RR Donnelley llegaron este lunes por la mañana a la planta para ingresar al turno de las 6 se encontraron con que las rejas estaban cerradas.
Guardias de seguridad les impidieron el paso y como toda explicación les dieron un comunicado extraoficial, sin sello ni firma, que informa el fin de las operaciones de la multinacional en el país.
"Lamentamos profundamente tener que comunicarle que, afrontados a una crisis insuperable y habiendo considerado todas las alternativas viables, estamos cerrando nuestras operaciones en Argentina y solicitando la quiebra de la empresa, luego de 22 años de actividad en el país", informa la hoja pegada en el ingreso de la fábrica, en el kilómetro 36.700 de la Colectora Panamericana, en la localidad de Garín, partido de Escobar.
En diálogo con Radio Mitre, el delegado Jorge Medina confirmó que pasadas las 7:30 comenzaron una asamblea con los empleados presentes para decidir los pasos a seguir. Finalmente, los trabajadores afectados definieron cortar el tránsito por la mañana frente a la empresa, en la colectora de la ruta Panamericana.
Gendarmería Nacional implementó un amplio dispositivo de seguridad a un costado de la ruta mientras que la policía bonaerense lo hace en los alrededores de la empresa estadounidense, según informó la agencia DyN.
El representante de la comisión interna de la fábrica recordó que ya Donnelley había pedido al Gobierno subsidios REPRO -por los que el Estado se hace cargo de parte del salario de los empleados, para evitar despidos- e incluso había intentado iniciar un proceso preventivo de crisis. Ambos le fueron rechazados en su momento.
El Ministerio de Trabajo también rechazó el intento de despedir 123 empleados que semanas atrás había realizado la compañía, que a nivel internacional declaró ganancias por u$s200 millones. Ahora quedarían en la calle sus 400 empleados.
"A partir del día de hoy, y hasta tanto la Corte Comercial competente tome una decisión al respecto, la planta de Garín permanecerá cerrada para asegurar la integridad física de los activos de la empresa, los cuales serán administrados por la misma Corte y, en su caso, liquidados entre los acreedores", detalló la compañía en el comunicado.
Medina denunció que en realidad la quiebra declarada es sólo "una maniobra para extorsionar" a los empleados para que acepten acogerse a un retiro voluntario. También aseguró que sería un intento de "extorsión" al Ministerio de Trabajo para conseguir "beneficios impositivos".
Otro delegado de la comisión, Eduardo Ayala, sostuvo luego por Radio 10, que el sindicato demostró que en la firma gráfica "no hay crisis alguna, es uno de los tres monopolios que concentra el 80% de la producción en impresiones del país y en 2012 y 2013 es la que más ha facturado de las tres".
"Nosotros en estos meses venimos denunciando el vaciamiento que estaban haciendo, derivando todos los trabajos a otros talleres para generar el ambiente de crisis y desazón en los trabajadores", sentenció el delegado.
Según Ayala, la compañía argumentó en el preventivo de crisis que "habían tenido una caída del 16% en la producción y no podían solventar los costos por la inflación que se había generado en el país y los problemas de exportación y la devaluación del dólar".
"Nosotros demostramos que la caída de la producción no era tal, sino que estaban desviando trabajo a otros lugares para generar vaciamiento de la planta. Demostramos con números concretos que no era real que no podían cubrir los costos, que a pesar de todos los problemas, era una empresa rentable y que en los últimos años fue la empresa que más facturó en la Argentina en el mercado de impresión", insistió.
En el taller de Donnelley en Escobar se imprimían revistas de Editorial Atlántida y folletería de Musimundo, Carrefour y supermercados La Anónima.
Medina asegura que a la compañía "trabajo no le falta" debido a que intentó recientemente reducir los sueldos e implementar el esquema de trabajo americano, que incluye sábados y domingos.