En la era de la computación, el Kremlin saldrá a comprar máquinas de escribir
Quien tenga una vieja máquina de escribir arrumbada en la casa, que llame al Kremlin: allá las necesitan.
El Servicio de Protección Federal, una agencia sucedánea de la KGB encargada de proteger al presidente ruso y sus colaboradores, realizó un pedido para una veintena de máquinas de escribir y está dispuesto a pagar u$s750 por cada una, informó AP citando al diario Izvestia.
La agencia, conocida por la sigla rusa FSO, cree necesario usar las viejas máquinas dactilográficas ante la revelación de los programas de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense por Edward Snowden y la anterior publicación de documentos secretos por WikiLeaks.
Incluso, el diario destacó que se utilizaron máquinas para escribir borradores de ciertos documentos oficiales e informes presentados al presidente Vladimir Putin, que tiene estrechos vínculos con el Kremlin.
Incluso, lo más llamativo fue que el FSO se excusó de hacer declaraciones.