Expertos detallan los nuevos desafíos e innovación en la auditoría interna

Los constantes cambios en los paradigmas de negocios, los estilos gerenciales y la irrupción de la tecnología en todos los procesos comerciales, industriales, financieros y administrativos, así como también la creciente demanda de transparencia en los negocios, hacen imprescindible que el empresario o emprendedor estén atentos a las necesidades de los clientes, las que cada vez se tornan insatisfechas más rápidamente.

Conforme lo desarrollado por ‘La Fábrica del Pensamiento’, perteneciente al Instituto de Auditores Internos de España, en su publicación ‘La Auditoría Interna y la Información no Financiera’, los inversores saben que el éxito de un proyecto empresarial depende cada vez más de la estrategia, de la calidad de gestión y del posicionamiento. Estos factores aumentan el valor de un proyecto por encima de su valor contable/financiero.

La auditoría no puede ser ajena a estas nuevas tendencias. Los avances científicos, tecnológicos, las transformaciones sociales y las necesidades de cumplimiento, son sólo algunos ejemplos en los que resulta posible percibir, que la forma de hacer negocios ha cambiado en los últimos treinta años más que en toda la historia.

Por lo descripto se impone una revisión y adecuación de las herramientas y mejores prácticas utilizadas por los Auditores Internos a efectos de adaptarlas a las nuevas realidades empresariales, de cara a los desafíos que imponen un trabajo proactivo de anticipación.

En este sentido, el desarrollar habilidades relativas a un profundo conocimiento de los Modelos de Negocios permitirá que el auditor detecte en forma proactiva posibles riesgos y eventualidades de potenciales fraudes que podrían llegar a impactar en los distintos procesos estratégicos, de gobierno, operacionales y administrativos.

A tal efecto, las buenas prácticas respecto de Gestión de Riesgos y de disuasión y prevención de fraudes incluyen herramientas que hoy en día deben ser conocidas y utilizadas por los auditores. El Stakeholder Analysis (análisis de los grupos de interés), el Modelo Canvas, y el Design Thinking con su componente de prototipado, son algunas de las nuevas prácticas que se tornan imprescindibles en la actual coyuntura de negocios.

El citado Modelo Canvas, diseñado por los autores Alex Osterwalder e Yves Pigneur en su libro ‘Business Model Generation” (2010), agrupa y consolida los principales aspectos que debe contener un Modelo de Negocios. El mismo posee la ventaja de ser de muy fácil comprensión, implementación y control.

Tanto las tareas de Aseguramiento como de Consulta deben tender a focalizar su atención en la evaluación proactiva de riesgos futuros que se detectan con la debida comprensión de los nuevos Modelos de Negocios, que adaptan permanentemente su estructura y contenido a las nuevas necesidades impuestas por los consumidores.