¿Qué va a pasar con el precio del asado?: tres claves para tener en cuenta antes de las Fiestas
En los últimos 12 meses, el precio de la carne se incrementó por debajo de la inflación promedio. El kilo de asado -que cuesta $1.156 según el Indec- aumentó 70,7% en el último año.
La paleta, otro de los cortes denominados populares, ajustó el 70,8%. En el mismo período de 12 meses, la inflación de los alimentos acumuló 91,6%. Casi 21 puntos más que la carne.
¿Va a continuar esta tendencia? ¿O, más bien, se modificará en las próximas semanas, con la inminencia de las fiestas de fin de año? Algo que suele suceder año tras año, por una cuestión estacional.
En el último reporte de CICCRA, la cámara da argumentos para explicar ese fenómeno en el precio de la carne, poco común en los últimos años.
Claves para tener en cuenta sobre el precio de la carne
Según indica CICCRA, en la comparación con noviembre de 2021, el precio promedio del animal en pie negociado en el mercado de Cañuelas se incrementó apenas 35,9%.
Eso apunta a una contracción de nada menos que 26,7% en relación con el nivel general de Índice de Precios Internos Mayoristas (IPIM) elaborado por el INDEC (que en el mismo período subió 85,4%).
En las carnicerías y en los supermercados, el aumento fue más sensible. Lo dicho más arriba: el asado se encareció un 70,7%.
Hay razones que permiten pensar en que el precio no se va a recuperar en el corto plazo. Son argumentos estructurales.
Una de las razones se vincula con la sequía, que obliga a los productores ganaderos a apurar la liquidación de cabezas. Esa mayor oferta, y las razones que obliga a ese fenómeno, le está poniendo un techo al precio del kilo vivo, creen los especialistas del mercado de hacienda.
Precio internacional en caída
En octubre, China pagó un promedio de U$S4.252 por tonelada, un 8,7% menos que en septiembre. Al comparar con el precio máximo que pagó en mayo de este mismo año, la baja fue de 17,7%.
A su vez, el precio promedio pagado por los países europeos registró una caída de 29,0% promedio entre abril y octubre de 2022. Mientras que en los casos de las ventas a los Estados Unidos. y Chile se anotaron descensos de 31,4%. Nada menos.
Consumo interno en mínimos históricos
El consumo de carne vacuna en el mercado interno no despega. Al mes de octubre se mantiene en tan sólo 47 kilos por habitante por año, un mínimo histórico.
Al comparar octubre de 2019 con el mismo mes de 2022, la retracción en el consumo fue de nada menos que el 7%.
Aunque se estima que hacia fin de año puede verse una recuperación en las ventas internas, básicamente porque el precio de la carne corre por detrás del resto, es improbable que se pueda hablar de un "boom", lo que también ayuda a ponerle un techo al precio interno.
Consumo en rojo y malhumor social
Si, efectivamente, el IPC de noviembre sale en torno al 5,5% y diciembre repitiera ese número -o incluso saltara al 6% (el último mes del año suele ser más caliente en materia inflacionaria), la inflación anual alcanzaría al 96,5% en el primer caso y al 97,5% en el segundo.
El escenario tiene un lógico y natural impacto sobre el humor social. No es casualidad que la imagen del Gobierno se encuentre en mínimos históricos. Aun por debajo de los años de la pandemia, cuando existía un áspero debate sobre la forma de enfrentar la circulación del coronavirus.